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Antoni Planas se ha convertido en la principal alternativa que maneja la direcció general d'Esports para cubrir el vacio de poder que se producirá en el seno de la Federación Balear de Fútbol (FTBF) ante la inminente inhabilitación de Antoni Borrás del Barrio y gran parte de su cúpula directiva. Planas, directivo del Real Mallorca, es un nombre que genera consenso en los despachos del Govern y asumiría la presidencia de la FTBF de forma interina, inicialmente hasta el 2004. El Comité de Disciplina Deportiva debe hacer público el próximo martes la resolución al contencioso interpuesto meses atrás por la Balear de fútbol sala (FBFS). Según ha podido saber esta redacción, los miembros del órgano disciplinario del Govern, que durante las últimas semanas ha estudiado el pliego de alegaciones remitidas por la FTBF, Federación Española y la propia FBFS, tienen prácticamente decidido aplicar a Borrás del Barrio y al grueso de su junta una sanción mínima de dos años por usurpación de competencias. Los servicios jurídicos de la Federación Balear de fútbol manejan la posibilidad de trasladar al contencioso a la justicia ordinaria y solicitar una suspensión cautelar, aunque Antonio Borrás del Barrio no tiene claro si dar este paso.

Aunque la Balear de fútbol sala notificó al Comité de Disciplina Deportiva su intención de retirar su demanda contra Borrás del Barrio, la vuelta atrás no ha sido posible. La instrucción del «caso Borrás» es equiparable a la de un proceso penal, de ahí que el nuevo tratado de intenciones de la FBFS no haya servido para paralizar el proceso. Los integrantes de este Comité también descartaron en su momento la posibilidad de reunirse con el presidente de la Balear de fútbol sala, argumentando que se atentaría contra cualquier ética por ser una de las partes implicadas en el proceso.

Entre las alegaciones que estudiaron ayer los letrados del Comité de Disciplina Deportiva destaca una carta remitida por el propio Àngel María Villar, presidente de la Española, en la que exculpa a Borrás. La RFEF interpuso en el año 1.999 un contencioso administrativo al Govern, poco después de que quedaran delimitadas las competencias de la territorial de fútbol y la de fútbol sala. Consciente de que la salida de Borrás del Barrio y su actual equipo de gobierno podría crear enormes problemas burocráticos, especialmente en la gestión de las competiciones, la direcció general d'Esports ha pensado en Antoni Planas para que asuma de forma interina el mando de la Federación. Planas presenta un currículo intachable como gestor. Ha estado ligado durante toda su vida al Real Mallorca, donde en la actualidad es el máximo responsable en materia de seguridad. Alterna su labor en el club bermellón con la presidencia de la Penya Arrabal, entidad destinada principalmente al trabajo con el fútbol base.