El Drac Inca se asoma al precipicio

DRAC INCA (21+17+18+27): Paris Bryant (27), Javier Bulfoni (14), Toni Carrasco (0), Alberto Alzamora (9), Rocky Walls (13), -cinco inicial-, Leo Gutiérrez (10), Miki López (4), Txomin López (0), Sergio Rodríguez (3) y Fernando Palacín (3).

23 de 42 en tiros de dos puntos, 7 de 26 en triples y 16 de 26 en tiros libres. 30 rebotes (20 defensivos y 10 ofensivos) y 26 faltas personales.

ULLA OIL (23+20+21+21): Michael Bree (16), Tom Wideman (11), Koke Rama (21), Chima Valentine (7), Àlex Escudero(15), -cinco inicial- Sanders (5), Raúl Mena (0), Andrés Real (0) y Adrián Boccia (10).

21 de 37 en tiros de dos puntos, 9 de 17 en triples y 16 de 24 en tiros libres. 31 rebotes (27 defensivos y 4 ofensivos) y 27 faltas personales.

Àrbitros:Garmendia (Madrid) y Sánchez (Cataluña). Señalaron falta antideportiva a Sergio Rodríguez y eliminaron a Wideman (minuto 38), Gutiérrez y Bulfoni (minuto 39).

Fernando Fernández

Drac Inca deberá dar el máximo en Santiago si quiere seguir siendo equipo de LEB. El conjunto inquense no pudo dejar la serie por la permanencia casi sentenciada y capituló (83-85) en un partido que el Ulla Oil controló en su mayor parte para llevarse el factor cancha e intentar dar el golpe en tierras gallegas. Ulla Oil le perdió el respeto al Drac Inca y con un parcial de 0-6 dejaba claras sus intenciones en vistas a equilibrar el choque. Los santiagueses no permitían que el conjunto de Sastre se pusiera por delante, pese a que Bryant y Gutiérrez lo intentaban desde todos los rincones. El destino quiso que el internacional argentino y Walls se pusieran con tres faltas más pronto de lo que el guión parecía haber fijado.

La facilidad que tenía Boccia para penetrar y encontrar tiros cómodos hacía el resto. A ello se unía la efectividad que otorga Koke Rama. Con todo ello y una antideportiva cometida por Sergio Rodríguez, el cinco de Castro afianzaba sus opciones. Entre Bree y Boccia daban vida a un Ulla Oil crecido y consciente de sus posibilidades. Con esas, al descanso el luminoso ponía en apuros a los inquenses (38-43) y un triple de Koke Rama hacía más dolorosa la herida. Casi sin quererlo, Ulla Oil se veía diez arriba (38-48), aunque un parcial de 7-0 devolvía el equilibrio a un partido que el equipo del instituto Rosalía de Castro no debía dejar escapar si quería seguir con vida en la LEB.

Desde 6'25 no existía tregua por parte del Ulla Oil, que volvió a tocar el cielo (48-58) después de que Rama y Escudero hicieran bueno el principal argumento gallego. Con el Palau ejerciendo la máxima presión ambiental posible, Drac Inca intentaba hacerse de una vez por todas con la supremacía en el luminoso pese a que no acababa de encontrarse cómodo en un encuentro que parecía esquivo. El 56-64 con el que daban inicio los diez minutos decisivos hacía pensar en un urgente cambio de planes por parte de Xavi Sastre. El técnico dispuso a toda su artillería sobre la pista y pareció evidente que el equipo varió su mentalidad. Bryant se puso los galones y con el permiso de un Ulla Oil despistado Drac Inca endosó un 7-0 que dolió en el banquillo santiagués (63-64) y marcó un punto de inflexión. Y es que el Drac Inca se ponía por primera vez por delante (65-64) y encorajaba a un rival que, lejos de perder el norte, siguió haciendo su baloncesto.

Entonces llegó el segundo bache del Ulla Oil, un espejismo pues Bree y Escudero endosaron dos triples dolorosos (71-75). El último minuto sirvió para que Koke Rama pusiera tiro a tiro la puntilla a un encuentro en el que Bryant tuvo la última opción para mantener más viva la ilusión cada vez más delicada de la permanencia.