La familia ciclista de la mayor de las Balears ha saldado de forma
definitiva una de las deudas históricas que aún quedaban
pendientes. Después de que Menorca y Eivissa sentaran serios
precedentes, este fin de semana arranca la primera entrega de la
Vuelta Cicloturista Internacional a Mallorca, que entre los días 2
y 4 de mayo reunirá a centenares de aficionados y practicantes en
una carrera exenta de cualquier carácter competitivo.
La prueba forma parte del programa «Ciclismo para todos»,
desarrollado por la Unión Ciclista Internacional, y es puntuable
para la Copa Illes Balears de Cicloturisme, organizada por la FCIB
para los poseedores de licencias competitiva y cicloturista. En la
tarde del viernes, la avenida Miquel Salvà de Llucmajor acogerá la
salida oficial. El conseller de Turisme, Celestí Alomar, cortará la
cinta que marcará el inicio de la carrera, con una etapa de 64,7
kilómetros que tendrá la línea de meta igualmente instalada en
Llucmajor.
Para el sábado se ha reservado un recorrido más accidentado.
Serán 98 kilómetros con las ascensiones a Valldemossa y Coll de
Sóller como obstáculos principales. Por último, el domingo se
pondrá punto y final con 74 kilómetros con salida y meta en
Aquapark y dos ligeras ascensiones. La entrega de trofeos y una
comida de grupo servirán para despedir la primera entrega de un
acontecimiento cuya continuidad está plenamente asegurada.
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