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Miquel Alzamora|BIRMINGHAM
El equipo balear sufre la ola de calor que no sólo invade la Isla de Mallorca ya que también Inglaterra se ve afectada por una temperatura elevada y que está a punto de alcanzar un registro histórico. Entre hoy y mañana se espera que el termómetro en Londres y también en la zona de Birmingham, donde está concentrado el Mallorca alcance los 35 grados.

Como es habitual, unos futbolistas asimilan mejor el trabajo que otros, pero la mayoría lo pasan bastante mal. Pacheco detiene también los entrenamientos cada cierto tiempo para que los jugadores tengan la oportunidad de reponer el líquido que se gasta durante la sesiones de trabajo. A todos ha sorprendido mucho el calor ya que, los dos primeros días de estancia en Birmingham la temperatura era bastante más baja y esta subida repentina está pasando factura.

Desde hace dos días el equipo se ve obligado a entrenar bajo un sol de justicia y los futbolistas están sufriendo mucho. En la jornada de ayer se acentuó más este sufrimiento ya que además de las altas temperaturas, los jugadores recibieron la primera paliza por parte del entrenador Jaime Pacheco que aprovechó la sesión matinal para realizar un entrenamiento intenso y especialmente físico.

Desde ayer, una parte importante del plantel está realizando una labor específica planificada tanto por el preparador físico, Antonio Natal como por el jefe de los servicios médicos del club, Joan Pericás. El hecho de que ayer no se tocara apenas balón durante la mañana y se realizara un trabajo puramente físico hizo que los masajistas tuvieran trabajo extra a la hora de dar masaje a los jugadores que precisan de sus cuidados.

El recién incorporado Bruggink notó también la falta de entrenamientos duros y le costó finalizar el circuito de trabajo diseñado por el técnico portugués. Hoy muy posiblemente el trabajo físico también sea igual ya que el entrenador intenta aprovechar al máximo los días que no hay partidos amistosos para que los jugadores empiecen a coger el fondo físico. El elevado número de encuentros planificados y los largos desplazamientos en algunos de ellos ralentizan la preparación específica que tenía diseñada Pacheco para esta pretemporada.

Mientras que todo esto sucede, el técnico luso sigue esperando noticias desde Palma en torno a la posible incorporación de los refuerzos que ha solicitado con vistas a este inminente inicio de campeonato. Pacheco se ha hecho una composición de lo que necesita y sus pretensiones pasan por conseguir la contratación de un jugador que actúe como defensa central y de dos hombres que se muevan por el medio campo, uno de ellos forzosamente tiene que ser el sustituto de Albert Riera en la banda izquierda. La opción de darle toda la responsabilidad a Toni González parece muy arriesgada, pese a las buenas maneras que ha mostrado.