Los miembros del llamado G-30 han acordado por unanimidad paralizar
el comienzo de la Liga de fútbol y emplazar a Sogecable a una
reunión el próximo lunes con el fin de acercar posturas en la
negociación por los derechos televisivos, motivo que ha generado un
cisma profundo entre los clubes de las categorías
profesionales.
El G-30, en la Asamblea General Extraordinaria que celebró en la
jornada de ayer en la sede de la Liga de Fútbol Profesional (LFP)
en Madrid, decidió que en breve convocaría a Sogecable para
mantener una reunión el próximo lunes con la intención de llegar a
una solución a principios de semana, según apuntó Alfredo
Rodríguez, director general del Celta de Vigo.
«Sogecable es quien tiene la palabra. Tendremos que ver si entre
todos somos capaces de negociar esta situación», indicó Rodríguez,
portavoz del G-30. El G-30 busca una mejora en la oferta hecha por
Sogecable después de la que en su día hizo Phedra Sport de 104
millones de euros, cantidad que dicha empresa no consiguió
avalar.
Rodríguez precisó que «la diferencia entre las posturas es de
entre 9 y 10 millones de euros», ya que la cantidad que ofrece
Sogecable es de ochenta y cuatro millones de euros. El G-30
considera «injusto» el trato que están recibiendo.
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