DRAC INCA (23+16+32+29):Ibarra (5), Rodríguez (10), Ezugwu (5), Johnson (23), Alzamora (15), -cinco inicial- Bustamante (16), Bulfoni (8), Young (18) y Carrasco (0).
COINGA MENORCA (25+26+12+25):Camps (21), Burgos (18), Floyd (15), Moss (8), Manzano (2), -cinco inicial- Otegi (13), Miguel (9), Aramburu (2), Rojas (0) y Gallarreta (0).
Àrbitros:Hermida y Enfedaque. Eliminaron por cinco faltas personales a Young, Bustamante, Moss, Floyd, Camps y Manzano. Además, señalaron antideportiva a Galarreta, Camps y Manzano. Castigaron con descalificante a Ezugwu.
Fernando Fernández
Drac Inca ratificó que la victoria del pasado fin de semana ante el Coinga Menorca en Maó no fue fruto de la casualidad. La cuarta edición de la Copa Illes Balears cayó en manos de los inquenses, que fueron de menos a más en un encuentro que tuvo un claro punto de inflexión en un tercer cuarto que acabó por sepultar las ilusiones del conjunto de Curro Segura, que en esos diez minutos encajó un 32-12 que por sí sólo describe la dinámica del encuentro disputado en Calvià.
Fue el Coinga Menorca el que empezó con más fuerza. Young y Ezugwu realizaron un excelente trabajo bajo los tableros, pero los mahoneses mostraban una frescura que se fue agotando con el paso de los minutos.
Las diferencias a favor de los de Segura fueron creciendo de forma alarmante, incluso ya entrado el segundo cuarto (29-43). Mientras Young bregaba bajo los tableros, las imprecisiones se adueñaban del grupo de Xavi Sastre, que tenía por delante una árdua labor.
Pero tras el descanso, la final de la Copa Illes Balears dio un giro radical. Drac Inca imprimió velocidad y agresividad a su juego, y apoyado en un excepcional Stevie Johnson -cuya capacidad atlética causó sensación-, comenzó a arañar puntos en el luminoso. Un triple de Sergio Rodríguez dejaba las cosas en el aire (54-55). La defensa del Drac Inca apretaba y al Menorca se le notaba que las baterías estaban bajas. Hasta que Jesse Young certificaba la defunción de los de Curro Segura (60-59). En ese preciso instante, los mallorquines asumieron el mando de la situación y los colegiados perdieron el norte en algunas acciones.
A medida que la diferencia crecía en favor del Drac Inca (71-63), la tensión también lo hacía. La eiminación de Moss dejaba al Coinga Menorca huérfano de solvencia en la pintura.
El momento álgido del nerviosismo que un clásico siempre lleva consigo llegó con la descalificante señalada a Ezugwu, quien se dirigió al colegiado de una manera que a buen seguro no le agradó, mostrándole el camino del vestuario.
El festival de triples capitaneado por un explosivo Bustamante, secundado como no por Sergio Rodríguez, acabó por desbordar las expectativas y abrir una brecha insalvable. El Coinga Menorca se desangraba en plena orgía baloncestística del Drac Inca, que provocaba el delirio de sus incondicionales seguidores en las gradas de Calvià.
Pese a que los de Segura lo probaron de todas las maneras, con su arsenal bajo mínimos, la remontada planteada no llegó y el Drac Inca mantiene la hegemonía en la pretemporada. Dos victorias en una semana avalan a un proyecto con aroma ganador y garra en su plantel.
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