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No hay dos sin tres. El Mallorca de Luis persigue su tercera victoria consecutiva en la Liga, un triple sin precedentes en el presente curso y que supondría la consolidación en la parte alta de la tabla. La metamorfosis que ha experimentado el grupo bermellón en estas últimas jornadas se inició el pasado 29 de octubre. Desde aquella mágica noche en el estadio de Riazor, donde el Mallorca firmó la primera victoria (0-2) en Coruña de toda su historia en Primera División, sólo ha doblado la rodilla en una ocasión, 0-5 ante el Valencia el pasado 2 de noviembre, logrando tres victorias y un empate en competición oficial. La buena racha mallorquina en la Liga arranca el pasado 9 de noviembre. El Mallorca goleó 4-1 al Murcia gracias a su mayor efectividad. La victoria, la primera en Palma con Luis Aragonés en el banquillo, le permitió salir del fango clasificatorio.

Tras dos semanas de descanso, por el compromiso de la selección, el bloque balear confirmó sus progresos en el estadio de Anoeta, donde ningún rival había sido de vencer en los últimos 20 meses. Un gol de Samuel Etoo y una defensa numantina le permitieron encadenar su tercera victoria oficial consecutiva, la segunda en la Liga, y salpicar de optimismo su futuro. Dependiendo de los resultados que se produzcan en esta jornada, el Mallorca podría escalar hasta la novena posición empatando a puntos con equipos como Racing de Santander, Málaga o Villarreal y a apenas dos puntos de la zona UEFA.

Por otra parte, Luis Aragonés ya ha dirigido seis encuentros del torneo doméstico y su balance numérico es de nueve puntos, una cifra que casi dobla los cinco que el Mallorca sumó en las seis primeras jornadas bajo el mando del portugués Jaime Pacheco, en cinco partidos, y de Tomeu Llompart en uno de ellos, el empate ante Osasuna. El mediapunta uruguayo Martín Ligüera se cayó de nuevo de la convocatoria facilitada ayer por Luis Aragonés. El charrúa, titular frente al FCK danés, se quedó fuera de una lista en la que tampoco figura el central Vicente.