Carlos Moyà y Rafael Nadal se han contagiado. La experiencia del
palmesano y la ilusión del manacorí han originado una fusión
ganadora. Dos semanas después de comenzar el curso 2004, el tenis
balear está de moda y sólo la lesión de Moyà en la final ante
Lleyton Hewitt en el torneo de Sidney ha conseguido detener la
euforia en la Isla ante la llegada del Open de Australia.
El esguince que padeció en el tobillo derecho durante la final
del torneo de Sidney es la principal preocupación de Carlos Moyà.
La organización del primer Grand Slam de la temporada no atendió a
las peticiones del top ten y de los capitanes del equipo español de
Copa Davis y no ha retrasado su primer partido programado en
Melbourne para hoy (cuarto turno en la Vodafone Arena). El
mallorquín saltará a la pista para medirse con el estadounidense
James Blake, aunque no esconde que considera que el encuentro llega
demasiado pronto para que las molestias le permitan jugar con
normalidad.
Después de haber ganado el Tata Open de Chennai (La India) y de
haber alcanzado la final en Sidney, Carlos Moyà confiaba en
realizar un buen Open de Australia para poder luchar este año por
el número uno. El cuadro era propicio. El estreno ante James Blake
se presumía como el encuentro más complicado hasta los cuartos de
final donde a priori debería enfrentarse ante Andy Roddick. Nombres
como los de Nicolas Lapentti, Arnaud Clement, Mardy Fish o Nicolas
Massu se mueven por su zona del cuadro, pero se trata de rivales
asequibles teniendo en cuenta que se trata de un Grand Slam.
Rafael Nadal no se ha planteado todavía ser el número uno del
mundo, pero su progresión está dejando boquiabierto al circuito
ATP. Durante la pretemporada ha mejorado su servicio, la volea y el
revés cortado, que unidos a sus impresionantes golpes desde el
fondo y media pista, han permitido que el inicio del curso sea
sobresaliente.
El jugador de Manacor debutará mañana frente al Michal Tabara.
El tenista checo ha llegado al cuadro final tras superar la fase
previa y es un desconocido. Su estatura (1.75 metros) permite
augurar que no cuenta con un servicio excesivamente potente, lo más
peligroso en pista rápida. Si Rafael Nadal consigue superar a
Tabara se medirá en segunda ronda con el vencedor del partido que
enfrentará a Félix Mantilla y al francés Thierry Ascione (su
verdugo en la primera ronda de Chennai).
Teniendo en cuenta el potencial de Nadal y su ilusión -se juega
un puesto en el equipo de Copa Davis- no se puede descartar que
alcance la tercera ronda ante Lleyton Hewitt. El australiano es uno
de los grandes favoritos del torneo, pero su juego favorece el
tenis de Nadal.
El Open de Australia permitirá conocer el estado de los tres
grandes aspirantes para luchar por el número uno: Andy Roddick,
Roger Federer y Juan Carlos Ferrero. El valenciano ha tenido
fortuna en el sorteo. Debutará ante Albert Montañés y se medirá
presumiblemente con Feliciano López en la tercera ronda. Federer se
mueve por la misma zona que Lleyton Hewitt y Rafael Nadal, mientras
que Roddick tiene en Carlos Moyà a su rival más peligroso hasta los
cuartos de final. Andre Agassi, también favorito, debuta ante Todd
Larkham.
Sin comentarios
Para comentar es necesario estar registrado en Ultima Hora
De momento no hay comentarios.