TW
0

C.M.O.
El Mallorca 2003-04 cambia de fisonomía en la mitad del curso. El club balear ha explotado al máximo la segunda oportunidad que ofrece el mercado de invierno para recuperar el tiempo perdido en el atípico verano, una etapa monopolizada por hoteleros y empresarios en la que el balón quedó relegado a un segundo plano. Ahora, con la porción principal de la propiedad en la isla, se ha apostado por remodelar el vestuario, taponar las vías de agua del presente y oxigenar al equipo de cara al futuro.

Finidi George, Edu Moya, Andrija Delibasic y Guillermo Pereyra han dotado al grupo de Luis Aragonés de un mayor abanico de posibilidades para dibujar su once. Pereyra y Delibasic representan la nueva apuesta. Pivote y delantero centro, dos piezas básicas en la columna vertebral de cualquier equipo, han firmado para lo que resta de temporada y cuatro años más. Edu Moya está cedido, pero el club se ha reservado una opción de compra de un millón de euros que, si todo transcurre dentro de los parámetros previstos, ejecutará en mayo. Y el futuro de Finidi, un futbolista dotado de un físico privilegio, dependerá de su rendimiento.

El Mallorca ha renovado prácticamente todas sus líneas en este mercado invernal. En defensa, el club se fijó en el extremeño Edu Moya. Con él, Luis dispone de un comodín para ambos laterales, un futbolista dotado de una gran capacidad física que el domingo podría disfrutar de su primer partido como titular ante la lesión de David Cortés. Además, si el técnico isleño opta por desplazar a Poli al centro de la defensa, Edu Moya se antoja como una alternativa para ocupar el lateral izquierdo, como ya sucedió en los últimos minutos del partido en La Romareda.