El regreso de la Copa Davis a Mallorca es toda una realidad después
de que en la jornada de ayer el president del Govern, Jaume Matas,
y su homólogo en la Real Federación Española de Tenis, Agustí
Pujol, plasmaran su firma en el convenio que oficializa la sede de
los cuartos de final de dicha competición. Éstos se disputarán
entre los días 9 y 11 de abril en el Coliseo Balear, con los
tenistas Carlos Moyà y Rafael Nadal como profetas en su tierra y
grandes reclamos para el aficionado.
Testigos de excepción del acto fueron la consellera de
Presidència i Esports, Maria Rosa Puig; la alcaldesa de Palma,
Catalina Cirer; el director general d'Esports, Pepote Ballester; el
presidente del IME, Rafael Durán, y el presidente de la Balear de
tenis, Jimmy Amengual.
Matas recordó que el mejor aval de Balears es la experiencia,
unida a la generación de jugadores que capitanean el equipo
nacional. «Esta ronda debe ser el primer paso para dotar a nuestras
Islas de una instalación modélica», significó Matas, mientras que
Agustí Pujol quiso agradecer el interés del Govern y auguró «un fin
de semana apasionante».
El coste de la eliminatoria entre España y Holanda asciende a
unos 500.000 euros, suponiendo el alquiler del Coliseo Balear un
gasto superior a 120.000. Los gastos del montaje de las dos pistas,
las estancias y demás corren a cargo de la RFET, cuyo presidente
siempre apostó por una semifinal en Mallorca.
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