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Siempre sonríe, incluso cuando acaba de romper el cristal de una iglesia. Es fácil reconocer su sonrisa, cargada de dientes unidos casi de forma aleatoria. Para Ronaldo de Assís Moreira, «Ronaldinho» (Porto Alegre, 1980), el fútbol siempre es motivo de diversión. Su rostro de niño y su melena rizada se han convertido en el nuevo icono del barcelonismo, que antes veneró a tipos como Romario, Ronaldo o Rivaldo. Llegó a Barcelona como reclamo electoral, poco después de que Beckham aterrizara en Madrid y con las dudas que generaba la escasa competitividad de la liga de la que procedía, la francesa. Sus años en el Paris Saint Germain le habían granjeado un nombre entre la elite del balompié internacional, y el Barça era ahora su gran reto.

En cada quiebro suyo, en cada regate, en cada cabriola, se adivina un futbolista excepcional. Rápido, explosivo, directo, siempre encuentra el mejor camino para llegar al área. Gusta arrancar desde atrás; se cose la pelota al pie y recorre el campo como si no llevara nada entre las botas. Cuando ha alcanzado la zona de influencia, localiza la mejor opción. Un disparo sesgado, una vaselina, una entrega al extremo que irrumpe desde la derecha, una combinación a dos toques.

Criado en el Gremio y madurado en Francia, el talento de Ronaldinho ha reventado en el Barça. Todo aquí, en la Liga española, tiene una mayor trascendencia. Apenas nadie recuerda que actuó en el Mundial de Corea y Japón o que ganó la Copa América con Brasil en 1999, pero su exhibición en Riazor o su golazo ante el Brondby aparecerán en todos los resúmenes televisivos de final de temporada. Ver a Ronaldinho es una gozada. No se lo pierdan.

X.C.S.
El FC Barcelona ha programado una serie de actos en el Nou Camp con motivo de la visita esta tarde del Mallorca. Tal y como ha venido haciendo durante toda la temporada, la entidad azulgrana ha preparado una fiesta paralela al partido. Esta vez las diversas actividades estarán relacionados con el Mediterráneo, y por eso el recinto barcelonista acogerá un espectáculo denominado «Mar-i-terrània», además de actuaciones musicales y la posibilidad de degustar productos típicos de las Illes Balears.

En la zona denominada como Boulevard -entre el Palau Blaugrana y la Botiga Megastore-, así como en la explanada de la tribuna, se desarrollarán la gran mayoría de actos bajo el título de Port Barça. Se realizarán actividades infantiles con un gigante hinchable, un barco pirata y un tiburón mecánico. Otra de las actividades será la del espectáculo «Mar-i-terrània», en el que dos compañías teatrales realizarán una representación de calle itinerante a partir de las 15.30 horas.

En esa misma explanada de la tribuna se instalará la carpa «Cala Son Moix», en la que se servirán productos de la gastronomía mallorquina. Tampoco faltará la habitual actuación musical, que en este caso correrá a cargo del grupo Port Bo, de Calella de Palafrugell. Interpretarán una versión especial del Cant del Barça «a capella» poco antes de que se inicie el encuentro entre el conjunto azulgrana y el Mallorca.

El FC Barcelona ha conseguido con estas actividades que el público vuelva al Camp Nou y que además se divierta antes del arranque de los partidos de fútbol.