Ahora el Milán es el gran favorito de la eliminatoria y el Depor
quien tiene todo por ganar y el deseo de plantarse por vez primera
en las semifinales. Enfrente tendrá a un rival en uno de sus
momentos más «dulces», que es líder arrollador del campeonato
italiano y que contará con casi todas sus numerosas figuras. Así,
la única ausencia segura en el Milán es la del lesionado defensa
Nesta y la duda está en si se recuperará el meta Dida, que es lo
más probable. La baja del primero la cubrirá Costacurta, que
conformará con Maldini una pareja defensiva que rozará los 74
años.
Irureta deberá tener especial cuidado a la joven estrella
brasileña Kaká: un auténtico media-punta, con buen arranque y
regate, un excelente disparo y una diversidad natural de juego que
muy pocos tienen. Mauro Silva y Sergio deben ser quienes le
cierren. Todo ello sin perder de vista a un dúo atacante móvil y
mortal, con el gran oportunismo de Inzaghi, especialista en
arrancar al límite del fuera de juego, y Shevchenko. Ambos capaces
de castigar la desatención defensiva.
Irureta parece orientado a presentar un once muy similar al que
ganó hace dos semanas en terreno del Juventus Turín, con el «rifle»
Pandiani de nuevo en ataque y a la espera que vuelva a matar. La
duda parece estar en quién cubrirá la baja de Víctor: podría subir
a Scaloni y meter en defensa a Manuel Pablo, o bien pasar a Sergio
a la banda y reforzar el centro del campo con Duscher. Carlo
Ancelotti presentará a sus habituales, incluido Filippo Inzaghi. La
única variación podría estar en la presencia de Ambrosini por
Gattuso, por aquello de dar una mayor vigilancia a Valerón y un
mayor respiro a Pirlo.
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