Una delegación del Real Mallorca acudirá el próximo sábado a la
estación de Atocha para rendir un emotivo homenaje a los fallecidos
tras los atentados de pasado 11 de marzo en Madrid. El acto tendrá
lugar a las 13.00 horas, unas horas antes del inicio del partido
que disputará el equipo isleño en el estadio Santiago Bernabéu.
La representación mallorquina, que estará integrada por el
presidente del Mallorca, Mateo Alemany, el gerente Pedro Terrasa,
el consejero Toni Calafat y el director de Relaciones Externas,
Joan Frontera, entre otros, depositará un ramo de flores en una
estación que tras los atentados, que costaron la vida a casi 200
personas, se ha convertido en un lugar de culto.
Los atentados del 11-M coincidieron con el partido europeo del
Mallorca en Newcastle. El club isleño, nada más tener conocimiento
de los hechos, solicitó la suspensión del encuentro, pero la UEFA
se negó. Días más tarde, el club abrió una fila cero y recaudó una
cantidad importante de dinero para la Asociación Víctimas del
Terrorismo. Asimismo, se plantó un olivo en la Ciudad Deportiva
Antonio Asensio en memoria de las víctimas.
El Mallorca, en Eivissa
Una vez finalizada la Liga, el Mallorca disputará la primera
edición de la Copa Illes Balears, un torneo que se disputará en
Eivissa los días 29 y 30 de mayo y que enfrentará al conjunto de
Luis Aragonés con el primer equipo de Menorca clasificado en la
Tercera División, de momento el Sporting Mahonés; de Eivissa, la
Peña Deportiva, y de Mallorca, que estará entre Poblense y
Santanyí, dependiendo de quien sea el mejor clasificado.
Por otra parte, Luis ensayó ayer sin Pereyra ni Finidi, que
arrastran molestias, aunque ambos podría estar recuperados de cara
al compromiso del Bernabéu.
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