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Con unos gramos más de ilusión y puntos en las alforjas, el Mallorca se presenta hoy en el Camp Nou (20.00 horas) con la autoestima reforzada y dispuesto a entrometerse en la carrera del líder. Con los números en la mano, el partido se presenta desigual. Diecisiete puestos y 33 puntos les separan. Un mundo. Pero el fútbol no se rige por principios matemáticos. Pese a la distancia sideral que separa el ático del sótano, las estadísticas revelan que el Mallorca se siente cómodo en el Camp Nou. Ganó 1-2 en la temporada 02-03, empató 1-1 en la 00-01 y arrolló 0-3 en la campaña 1999-00 en la primera exhibición de Samuel Etoo en España.

Con el camerunés en el bando enemigo, estos datos pueden suponer papel mojado ante un Barça cuestionado por Cruyff pero líder, que jugará con Márquez como central, con Albertini en la sala de máquinas y con Sami como faro ofensivo. El camerunés, que anotó dos goles en Son Moix en la primera vuelta, ha vuelto a recordar que en el caso de que marque, no celebrará ninguno de los goles...Toda una declaración de intenciones.

Los caprichos del calendario ha querido que mida sus fuerzas con el Barça en su mejor momento del curso. El grupo balear acumula alegrías en el último mes, mientras que la máquina de Rijkaard presenta síntomas evidentes de fatiga. La trayectoria de ambos equipos en las últimas citas no puede ser más opuesta. Incluso el Mallorca ha capturado más puntos que su oponente en este mes de febrero. Mientras el Barça ha tragado saliva para sumar los puntos, sobre todo ante su hinchada -perdió 0-2 el Atlético y empató 1-1 el Valencia- y ha visto cómo el Madrid le ha recortado 9 puntos en este 2005, el Mallorca está en plena mejoría y divisa la tierra prometida a sólo dos puntos.