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Florentino Pérez, presidente del Real Madrid, visitó La Ciudad del Fútbol donde se reunió con plantilla, cuerpo técnico y responsables deportivos, para pedirles unidad y posteriormente pedir en una rueda de prensa respeto y tranquilidad para evitar que se desestabilice el club. Florentino Pérez quiso zanjar todos los acontecimientos que se están sucediendo desde que el Real Madrid fue apeado de la Liga de Campeones en una eliminación contra el Juventus que calificó de injusta. Molesto con los rumores sobre posibles fichajes y el presidente pidió respeto para los jugadores de la actual plantilla.

Nada más concluir la sesión matinal del Real Madrid, todos los jugadores estaban citados en uno de los salones de la zona residencial de La Ciudad del Fútbol. Allí, esperaba el presidente, acompañado de Emilio Butragueño, vicepresidente y director deportivo del club, y el italiano Arrigo Sacchi, director de fútbol. El entrenador brasileño Vanderlei Luxemburgo se unió, acompañado de las personas que forman el cuerpo técnico. La reunión duró alrededor de cuarenta minutos. En ella, y tras la primera intervención del presidente, los jugadores de más peso del vestuario madridista dieron su punto de vista sobre los problemas que están sufriendo.

Florentino Pérez levantó el ánimo de sus jugadores y transmitió el mensaje más optimista posible: «La Liga es aún posible si ganamos los próximos diez partidos». A la conclusión de la reunión, explicó los motivos de su visita. «Ha sido un reunión que he creído oportuna por unidad, trabajo e ilusión, sabiendo que nuestro compromiso es dar satisfacción a los millones de seguidores que tenemos», indicó. «Les he recordado que forman parte de la plantilla del Real Madrid y que han hecho un fútbol espectacular en los últimos años. Les he pedido que se recuperen del golpe psicológico de la eliminatoria en Turín y que den todo su esfuerzo y profesionalidad», añadió. «Les he desmentido todos los rumores sobre posibles futbolistas. Les he pedido que se mantengan unidos y que no se preocupen ni se desestabilicen. Estamos convencidos de que vamos a dar mucha guerra hasta el final», agregó. De esta forma, el presidente del Madrid ha querido zanjar lo que considera una campaña de deterioro de imagen. Como ejemplo, puso el viaje de Ronaldo por un compromiso publicitario.