TW
0
España 3
China 0

ESPAÑA: Casillas; Puyol, Pablo, Juanito, Del Horno; Joaquín, Xavi, Albelda, Luque; De la Peña y Fernando Torres.
Cambios: Sergio Ramos por Puyol; Orbaiz por Albelda; Mista por Fernando Torres, Valerón por Xavi, Luis García por Joaquín y Reyes por Luque.

CHINA: Lu Yunte; Wei Xin, Yonghai, Weifeng, Du Wei, Mingiy; Junghe, Yonggiang, Xunlong; Shao Jiai y Li Yi.
Cambios: Yougen por Weifeng, Yaokun por Du Wei, Sun Xiang por Xunlong, Yang por Yonghai y Zheng Bing por Li Yi, Shi Jun por Shao Jiai.

Àrbitro: Luciano Cardoso. Mostró cartulina amarilla a Wei Xin, Zhang Yonghai, de China, y a Reyes, de España.

Goles:
1-0, minuto 3, Fernando Torres de penalti.
2-0, minuto 31, Xavi.
3-0, minuto 53, Joaquín.

Luis Villarejo|SALAMANCA

Joaquín e Iván de la Peña ayudaron a España a recuperar la autoestima en un partido fácil, de recreo, donde nunca sufrió ante un débil enemigo como China, a la que endosó una goleada que sirve para animar al colectivo de Luis Aragonés, antes de encontrarse con Serbia en la lucha por un billete para el Mundial 2006. España arrancó bien. Y lo hizo a balón parado. Primero con un penalti de Fernando Torres, luego con una falta de Iván de la Peña. Luego le anularon un gol a Pablo Ibáñez tras un córner. Son datos plausibles poder resolver de esa forma. China se convirtió en un laboratorio interesante para ver el funcionamiento del equipo ante del gran encuentro de Belgrado del próximo miércoles. Del partido del año en Serbia. A Luis Aragonés no le salió mal el invento. Al final, se quedó Valerón fuera de inicio. Confió el mando a la cantera del FC Barcelona. Xavi-De la Peña volvían a estar juntos. Y los dos cumplieron a la perfección. España se dio un paseo en el Helmántico. Nada que ver este equipo de China con el que se vio en el Mundial de Corea y Japón. Con tres centrales, una defensa de cinco, China jugó con mucho miedo.

Y para romper esa masiva presencia de tipos que no querían jugar el balón, De la Peña se erigió en protagonista. Tiró de sus pases de delineante, de escuadra y cartabón, especialmente uno, a los once minutos, con destino a Joaquín, que levantó la admiración del personal. A De la Peña se le ve a gusto en el campo. Disfruta como nunca del fútbol. Y si enfrente no hay nada con poso, las diferencias son abismales. Comenzó rápido España a tumbar a China. A los tres minutos, un agarrón absurdo de Zhao Junzhe a Luque, se convirtió en un penalti, que mandó luego Fernando Torres a la red. Funcionó la fluidez y la circulación de España. Es algo que persigue siempre Luis Aragonés. Sin embargo, a los suyos les faltó más instinto depredador. Más gol. Se le anuló un gol a Pablo, siempre atento en el juego aéreo, Albelda rozó el tanto con un disparo seco, pero el 2-0 no llegó hasta que Xavi acertó su libre directo al borde del área.

España debe tener más veneno arriba. No puede perdonar tanto. Es algo que Luis Aragonés y su cuerpo técnico insisten en esta fase de clasificación, donde la diferencia de goles puede dejarte fuera de un Mundial, como le ha ocurrido a China recientemente. Tras el descanso, Luis cambió el equipo. Dio el testigo a Sergio Ramos y a Mista, que debutaban. La dupla Valerón-Orbáiz ocupó el sitio de Xavi-Albelda. Reyes se echó al costado izquierdo. Joaquín apareció más y España jugó con mucho toque y con las diagonales de Iván de la Peña hacia Reyes como principal argumento defensivo. Con todo este arsenal de 'jugones' -Joaquín, Reyes, De la Peña, Valerón-, siempre se puede esperar detalles de altura. En uno de ellos, Joaquín, a su aire, mandó una hermosa vaselina que levantó al público de la grada. Era el 3-0.