X. Cruz01/04/05 0:00
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Apenas
recuerda el día en el que se estrenó. Ese domingo, ante el Deportivo, se calzó las botas y se vistió la zamarra del Mallorca por primera vez, algo que celebró con un soberbio gol tras un remate de cabeza. Decenas de periodistas japoneses habían viajado hasta la Isla para seguir las evoluciones de Yoshito Okubo, aquel fichaje mediático. De eso hace mucho y, desde entonces (9 de enero), el delantero asiático ha tenido pocas oportunidades para sonreír. Lesiones, suplencias y poca cuota de responsabilidad en el juego han dejado a Okubo en un segundo plano, a pesar de que el japonés asegura que es feliz en Mallorca: «No me arrepiento de haber venido», dijo ayer el futbolista.

Ha recuperado la felicidad después de superar sus problemas en la espalda y advierte la posibilidad de jugar ante el Atlético, plaza que se disputa con Correa. Por eso, tras el entrenamiento, no dudó en asegurar que está listo: «Me siento bien y con ganas para ayudar al equipo en todo lo que pueda, siempre que el míster lo crea oportuno», aclaró. Okubo fue cuestionado sobre su futuro, pero no quiso ir más allá: «No sé si me quedaré, pero lo que quiero es que el Mallorca siga en Primera», señaló el delantero nipón. Ayer se ejercitó con total normalidad, a pesar de que en el ensayo del pasado miércoles ante el Poblense actuó como suplente.

Por su parte, el central Sergio Ballesteros necesita el triunfo de forma perentoria el domingo ante el Atlético: «Tenemos que ganar como sea, a pesar de que algo tiene que cambiar para que lo logremos», aclaró el defensa. «Sí, es un rival muy difícil de derrotar en su campo, pero no nos queda otra opción que intentarlo, aunque si estamos como el día del Sevilla, no sé, algo tiene que cambiar para que este equipo empiece a ganar partidos», añadió. Cúper también tiene la buena noticia de la recuperación de Poli.