Alejandro Camaño, representante de Héctor Cúper, se desplazó ayer a
Palma para tratar con los gestores del Mallorca el futuro del
técnico argentino y la revisión del contrato que vincula al
preparador de Chabas con el club isleño. El agente se reunió con
los dirigentes mallorquinistas para empezar a perfilar lo que
deberá suponer una rebaja en el salario de Cúper, que tiene dos
años más de contrato y una ficha desorbitada para entrenar a un
equipo en Segunda División. La primera toma de contacto fue
«positiva» porque hubo «buena predisposición» por parte del técnico
de rebajar sus emolumentos, aunque las negociaciones todavía están
muy inmaduras.
Cúper se detuvo el pasado martes ante los medios después de
citarse con Alemany y lo dejó claro: «Tengo muchas posibilidades de
quedarme en Segunda División». Eso lo aceleró todo, porque ya nadie
esconde que el equipo ha descendido y que el primer vértice del
nuevo proyecto es el técnico. Esas declaraciones precipitaron la
reunión de ayer, en la que Camaño empezó a conocer de primera mano
la intención del Mallorca de revisar el contrato de Cúper.
El consejo de administración tiene muy claro que el Mallorca no
puede asumir la actual ficha del entrenador sudamericano, por lo
que ya le ha hecho saber que la única forma de mantener el lazo
profesional es rebajar sus honorarios. El preparador bermellón ha
abrazado, en principio, esa petición porque es un tipo que ha
demostrado estar comprometido con el club y con la Isla, pero
todavía no se han tratado cifras concretas. Es más, Alejandro
Camaño aseguró tras la reunión que no tenía «nada que decir» sobre
el futuro de Cúper en estos momentos.
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