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Javier García-Ochoa|BARCELONA
El italiano Jarno Trulli (Toyota) dejó ayer mudos a los cerca de cien mil espectadores que ha acudido al Circuito de Catalunya a presenciar la primera sesión de clasificación del Gran Premio de España, al batir por dieciséis \132 milésimas de segundo a Fernando Alonso (Renault). Su amigo Jarno Trulli ya le aguó el año pasado la fiesta a Fernando Alonso al arrebatarle el podio por siete décimas de segundo y este año también parece dispuesto a que la fiesta no sea completa en el circuito de Montmeló. Alonso era el último en salir a la pista, como vencedor del anterior Gran Premio de San Marino, y el tiempo a batir era el de Trulli, 1:14.795. Su paso por la línea de meta fue saludado con el sonar de las bocinas, los espectadores puestos en pie y las banderas azules ondeando.

En el primer sector Alonso marchaba ya con unas milésimas de segundo por encima del tiempo de Trulli, pero nada estaba perdido; al \132 completar el segundo y aparecer en verde su ventaja de dos décimas la alegría estalló en las tribunas y parecía que el primer puesto estaba asegurado. Pero cuando cruzó la línea de meta y volvió a aparecer la diferencia de 16 milésimas de segundo en un cuadro naranja en las televisiones gigantes instaladas en el circuito, el circuito enmudeció incrédulo. Sin embargo los cien mil espectadores habían podido disfrutar de un espectáculo de primer orden ya que al final los cuatro primeros clasificados, Trulli, Alonso, el finlandés Kimi Raikkonen (McLaren-Mercedes) y el alemán Ralf Schumacher (Toyota), terminaban separados por tan solo 75 milésimas de segundo y todo por decidir mañana para conseguir el primer puesto de la formación de salida.

Ya se conocía el potencial de los Toyota y que en este circuito iban a ir muy bien, como así ha sido. Trulli, que ha partido desde la primera fila de la formación de salida en tres de los cuatro Grandes Premios disputados, ayer no tuvo ningún detalle con su amigo Fernando y ha completado una gran vuelta. Fernando Alonso había rodado muy poco por la mañana en los entrenamientos libres por un «pequeño problema mecánico», no especificado, pero a pesar de todo confiaba en dar una alegría a todos sus seguidores. Con el primer puesto como único objetivo, quizá el primer decepcionado por no haber sido ayer el más rápido ha sido el propio Fernando Alonso, que sin embargo tiene intactas todavía todas sus posibilidades para lograr mañana «la pole» y la victoria, su cuarta consecutiva en la temporada.