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Fernando Castán|LE MANS (FRANCIA)
El español Daniel Pedrosa silenció ayer el mítico circuito de Le Mans al vencer al francés Randy de Puniet en las últimas curvas de la vuelta final, y recuperar, además, el liderato del Mundial que perdió en la última carrera, el Gran Premio de China. El mallorquín Jorge Lorenzo, con Honda, se quedó al final en la quinta plaza por detrás de Pedrosa, De Puniet, con Aprilia, Andrea Dovizioso, con Honda; y el australiano Casey Stoner, también con Aprilia, pero demostró que puede luchar con los mejores. Incluso se permitió la licencia de encabezar la carrera en algunas de sus fases, pero en esta oportunidad, Lorenzo realizó una carrera completa y ya es octavo en la general del Mundial.

Pedrosa hizo una de sus mejores carreras en el circuito del noroeste francés y encadenó su tercera victoria consecutiva en éste trazado ante miles de personas volcadas con el piloto local. El español venció en 2003 en la categoría de 125 centímetros cúbicos y el año pasado en la de 250, y en ambas acabó proclamándose campeón del mundo al final de la temporada. Ayer hubo un momento que pareció tener todo en contra y que se cortaría su racha. Pedrosa rodó en un grupo de lujo y mediada la carrera llegó a ir el último de los seis pilotos que componían el mismo, luchando con sus máximos rivales del campeonato, a los que se incorporó Lorenzo, que fue primero, pero que pagó el esfuerzo que sus neumáticos tuvieron que hacer en una gran remontada.

La carrera comenzó con Dovizioso, hasta ayer líder del Mundial, al frente, seguido de Stoner y Pedrosa, mejor puesto en los entrenamientos oficiales, De Puniet, en cuarta posición, y el argentino Sebastián Porto y el sanmarinense Alex de Angelis, ambos con Aprilia, cerrando el grupo de cabeza. Lorenzo hizo una vuelta rápida tras otra para incorporarse al quinteto de cabeza y se ahorró un rival cuando De Angelis se cayó tras 19 vueltas de carrera. El argentino Porto también siguió el camino de los boxes en la decimotercera vuelta por problemas mecánicos.