Un año más, y ya van cientos desde la primera vez que se vieron las
caras, el Real Madrid y el Barcelona se enfrentan en el denominado
«partido del siglo»; otro más desde el cambio de milenio. Cada
curso futbolístico hay dos partidos del siglo, el que se juega en
la capital de España y el de la Ciudad Condal. Éste tiene el morbo
del resultado, porque ambos llegan en un buen momento, aunque es el
grupo de Rijkaard (segundo con 22 puntos) quien mira por encima del
hombro al de Luxemburgo (tercero con 21).
El maratón de partidos de las distintas selecciones nacionales
también puede influir en el rendimiento de unos y otros, que han
repartido a sus jugadores por todos los confines del planeta, pero
que estarán sobre la hierba del Bernabéu.
Los lesionados llegarán prestos y dispuestos, sobre todo los
madridistas. Ronaldo Nazario y Julio Baptista se entrenaron ayer
con el resto de compañeros con total normalidad y estarán a punto
el sábado a partir de las 20.00 horas. Ambos futbolistas encaran la
recta final de sus respectivos procesos de recuperación y ayer se
ejercitaron al mismo ritmo que los demás componentes de la
plantilla, lo que asegura que estén en la convocatoria de Vanderlei
Luxemburgo, técnico del conjunto blanco, para el clásico contra el
equipo azulgrana.
Baptista trabajó con una cinta en la rodilla izquierda, al más
puro estilo de Rafa Nadal, y no tuvo problemas en correr, arrancar
en potencia y disparar a puerta con ambas piernas, lo que demuestra
que la lesión que tuvo hace un mes está olvidada.
Ronaldo también se entrenó al cien por cien y disparó a puerta
sin problemas, por lo que será titular si Luxemburgo lo cree
oportuno, aunque también podría decidir que empezara el encuentro
en el banquillo. Esto abriría la titularidad en la punta de ataque
a su compatriota Robinho, quien formaría la dupla atacante con
Raúl.
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