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La regularidad del Drac Inca le ha permitido acomodarse varias semanas en el liderato de la LEB. Podría apropiárselo en solitario si el Palma le concede la licencia de vencer al León, pero al cuadro de es Raiguer se le presenta una ocasión dorada para imponerse en una cancha a día de hoy asequible y dar un zarpazo en la tabla. Los mallorquines visitan al Tenerife (21:00, hora insular) y lo hacen obligados por las circunstancias a seguir avanzando en sus objetivos.

La ausencia de problemas físicos ha sido una constante a lo largo de la semana. Toda vez que Alberto Ruiz de Galarreta se ha recuperado del esguince de tobillo producido en la semifinal copera, las únicas atenciones las ha requerido el escolta Sergio Rodríguez, que padeció un fuerte golpe en el hombro que le ha mantenido al margen de las sesiones de entrenamiento, pero que no le impedirá estar hoy en el banquillo del pabellón Santiago Martín.

El golpe de la Copa fue superado por la vía rápida a costa del Tarragona (92-86) y en Canarias se presenta una reválida que deben aprovechar los gualdinegros para seguir acumulando victorias.

Los números del Tenerife no son los esperados por el nivel de su plantilla. Un balance de 9-12 les mantiene relativamente alejados de las ocho primeras plazas, pero la victoria en Calpe (86-87) supuso un balón de oxígeno notable para Jareño y sus hombres, que pasan un serio test ante un Drac Inca que llega como rival a batir y con todo su arsenal a punto.