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A.Orfila/F.Fernández
La paz vuelve al seno del Atlètic Balears. Después de que estallara la última crisis con motivo de las discrepancias surgidas entre el presidente de la Procampo, Jeroni Petro, y el máximo dirigente de la entidad blanquiazul, Damià Estelrich, la calma ha regresado a la Vía de Cintura con lo que este último seguirá al frente del Atlètic tras haber conseguido el ascenso a Tercera División en su primera campaña al mando de la nave blanquiazul. Finalmente, Petro se ha disculpado ante Estelrich, cuya marcha parecía un hecho si no se zanjaban las diferencias, y la Procampo cederá la gestión de la publicidad del Estadi Balear, epicentro del pulso, al club. Aunque el panorama cambiará en un futuro, pues se han iniciado las gestiones para la creación de una Fundación que se encargue de controlar esta faceta. De la misma manera, la Procampo continuará manteniendo la explotación de los bares del campo de la Vía de Cintura, que también pasará a manos de la futura Fundación.

Al mismo tiempo, el club se ha comprometido a saldar la deuda económica que mantiene con Jeroni Petro. El propio Estelrich y Matthias Kühn se han fijado como premisa liquidarla y saldar las cuentas pendientes con el presidente de la Procampo, cuyo papel sigue siendo relevante dentro del devenir de la histórica entidad. En el libro de ruta de Estelrich y su equipo de trabajo, una de las premisas básicas es hacer del Atlètic Balears un club serio, recuperando la imagen que una de las entidades con mayor solera siempre ha tenido dentro del mapa futbolístico balear y español. En la misma línea, Estelrich mantendrá hoy una reunión con el regidor de deportes del Ajuntament de Palma, Rafael Durán, con la remodelación del Estadi Balear y las intervenciones del IME en el mismo como punto estrella en la agenda de ambos responsables.