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Efe|KAMEN
La selección española realizó ayer su segunda sesión de trabajo en el Centro Stadium Kaiserau en la que Aragonés no dio pistas sobre el equipo y preparó un entrenamiento táctico.

En la sesión, de algo más de una hora de trabajo, el seleccionador dividió a sus veinte jugadores de campo en tres grupos y estuvo trabajando el pase el desmarque en corto y otras acciones para mejorar la conjunción del equipo. El susto de la sesión lo protagonizó Raúl, que sufrió un golpe en un dedo del pie derecho, aunque tanto el delantero como los médicos confirmaron que no reviste mayor importancia. El capitán de la selección española se convirtió en el gran protagonista del día, aunque el golpe «no tiene ninguna importancia», afirmó Genaro Borrás, el médico del equipo nacional.

Es más, Raúl abandonó descalzo el césped con buen humor dialogando con Luis Aragonés tras un entrenamiento intenso de hora y media que se disputó en las instalaciones deportivas en Kamen.

Raúl se mostró esperanzado en lo que deparará el Mundial de Alemania 2006 para España, en la que aseguró que al margen de cuestiones individuales la clave es que todos se sientan «importantes. Hay que preocuparse de otras cosas del equipo y dejar de individualizar, aquí lo importante es la selección española y no el jugador, sea Raúl, sea el capitán...», dijo. «Lo importante es la selección, va a haber oportunidad para todos y todos nos tenemos que sentir importantes», comentó Raúl, quien admitió que en Corea-Japón 2002, su segundo Mundial, se quedó «con la espina de no haber podido estar en el partido de cuartos», por lesión, ante Corea del Sur.

Indicó que es «una oportunidad única que hay que aprovechar» y apostilló que «vestir la camiseta de España es una sensación que no tiene nada que ver con lo que pasa en tu club. Para mí es totalmente diferente, con una ilusión enorme y esperanzado de que poco a poco nos vamos a hacer un hueco en el Mundial», añadió Raúl.

El capitán español apuntó que están muy contentos con las instalaciones del hotel y los campos de entrenamiento, así como agradeció el recibimiento y el cariño que han notado de la población de Kamen, que les hace sentirse «muy cómodos y bien para preparar ese primer partido contra Ucrania».

«La gente está siendo muy respetuosa, nos sentimos como en casa con tanta bandera española y la gente nos está dando todo su apoyo. Ojalá que aquí estemos hasta el 8 de julio», manifestó Raúl, quien reconoció que tiene ganas de que comience el Mundial. Advirtió que España tiene que ir «paso a paso» y pensar primero en la clasificación para octavos de final «y si es como primeros de grupo mucho mejor. Es una selección joven, con mucha ilusión, con una gran calidad y también hay gente con mucha experiencia. Está selección está capacitada par ir partido a partido y soñando con ir haciendo algo grande», aseveró Raúl.

Por su parte, Cesc Fábregas manifestó que la experiencia acumulada en los anteriores mundiales que ha disputado le hace saber que «nada es imposible» para Alemania 2006. «Tengo la suerte de estar en tres mundiales en los últimos años (incluye este) y me hace ver, aunque lógicamente no sea lo mismo, que nada es imposible», dijo Cesc. Cesc explicó que los entrenamientos como el de este viernes demuestran que la idea de la selección es mantener la posesión del balón. «Está claro que lo que queremos es tener el control del partido en todo momento, como venimos demostrando en los clubes. Va a ser fundamental. Está claro que los entrenamientos son una baza de práctica y hay que seguir trabajando en este aspecto más que nada», comentó.