Pisculichi se ejercita durante una sesión. Foto: MONSERRAT

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Leo Pisculichi no está en venta. El Mallorca paralizó anoche el que hubiera sido su traspaso del verano y rechazó la suculenta oferta de un grupo de inversores argentino que ponía cinco millones de dólares (unos cuatro millones de euros) sobre la mesa para hacerse con los servicios del futbolista sudamericano. El club balear, en un gesto sin precedentes cercanos, desestimó finalmente la propuesta y el jugador seguirá defendiendo la camiseta del club bermellón a petición de la dirección deportiva. El Mallorca había recibido en las últimas una oferta formal y por escrito procedente de Argentina que tenía aPiscu como el principal protagonista. En la misma, un intermediario ofrecía la cantidad antes mencionada para adquirir en propiedad los derechos del jugador y cederlo posteriormente al Independiente de Avellaneda, que siempre ha tenido al centrocampista en su lista de preferencias ya que ve en él a uno de los grandes valores de futuro del balompié argentino. La operación, desde el punto de vista económico, era realmente golosa para la SAD isleña, ya que de los cinco millones de dólares que había sobre la mesa cuatro iban a ser pagados al contado y el resto se cobraría a través de una financiera durante los tres próximos meses, lo que garantizaba a todos los efectos el cobro íntegro de la cantidad. Teniendo en cuenta que Pisculichi recaló en el club el pasado mes de enero por unos tres millones de euros, su venta hubiera estado más que justificada, pero la ambición deportiva del club truncó el traspaso en el momento decisivo.

Ya con la oferta plasmada sobre un papel, el presidente del Mallorca, Vicenç Grande, dio un nuevo paso al frente en busca de luz. Decidió trasladarle la propuesta a sus hombres de confianza y convocó Nando Pons y Gregorio Manzano para una reunión en la que se tomó la decisión final. El secretario técnico y el entrenador, tras valorar los pros y los contras de la operación, se decantaron por retener al futbolista para no desequilibrar el vestuario y el presidente les dio su aprobación. El Mallorca volvió a dirigirse al grupo de inversores para agradecerle el interés mostrado en el futbolista, pero cerró las puertas de su salida. Antes de eso, Pisculichi había sido requerido por los medios de comunicación para hablar de su posible marcha, pero el jugador no fue demasiado rotundo en sus afirmaciones: «Me enteré del tema porque me lo comentaron, pero aquí nadie me ha dicho nada y sólo pienso en viajar mañana (hoy para el lector) a Austria con el resto de mis compañeros, ya que mi intención es hacer la pretemporada con todos». El argentino en cambo, se mostró encantado de seguir llamando la atención en su país: «Para mi es un orgullo que un equipo de Argentina se fije en mi para ficharme, pero yo estoy muy contento aquí. De todas formas, todo lo que tenga que ver con mi venta no depende de mi», aclaró.

Leonardo Pisculichi llegó al Mallorca procedente de Argentinos Juniors y tras su debut del pasado 15 de enero ante el Zaragoza se convirtió en una pieza indispensable para Gregorio Manzano a la hora de blindar la permanencia en Primera división. Ha disputado dieciseis encuentros como rojillo en los que ha anotado 3 tantos y los técnicos de la entidad creen que, una vez superado el periodo de adaptación al fútbol europeo, será uno de los jugadores más desequilibrantes del plantel.