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Tolo Jaume
Los flamantes campeones del mundo de la clase Platu fueron homenajeados ayer en el Real Club Náutico de Palma, que rindió el merecido tributo a los sucesores de Juan Galmés, que en 1994 fue el último representante del club que conquistó un título mundial. Después de haber alcanzado la cima en aguas viguesas, los tripulantes del «Rex Motors» y el armador de la embarcación recibieron una placa conmemorativa de manos de los responsables de la entidad presidida por Matías Salvà y del concejal de Esports del Ajuntament de Palma, Rafael Durán, que expresó su apoyo a los regatistas mallorquines. Más de cincuenta personas entre familiares y amigos se congregaron alrededor de las 19:00 en las instalaciones del Real Club Náutico de Palma para compartir la alegría de los deportistas y transmitirles su enhorabuena.

El objetivo inicial de la tripulación en el Mundial de Platu no era otro que acabar entre los diez primeros, pero la situación cambió radicalmente cuando en mitad de la competición los mallorquines se apoderaron del liderato. Una vez en cabeza los mallorquines fueron mejores que las embarcaciones comandadas por figuras de talla internacional y ayer sus rostros delataban la gran alegría del logro cosechado. Manu Weiller, Joan Fullana, Matías Bonet y Xisco Pomar recibieron el calor de su entorno en un encuentro en el que sólo faltó Javi Jáudenes, que no pudo asistir al homenaje. Otro de los estandartes del RCN de Palma en el ámbito deportivo, Hugo Ramón, no se perder la cita e hizo llegar su felicitación a los campeones.

A sus 22 años el patrón del «Rex Motors», Manu Weiller, ha engordado sustancialmente su palmarés a lo largo de la temporada 2006 y ahora tiene el privilegio de contar con una tarjeta de presentación en la que figura un título mundial que puede catapultar definitivamente su carrera. Una de sus metas es alcanzar la vela profesional, pero tampoco descarta la posibilidad de centrar parte de sus esfuerzos en las clases olímpicas y quizás en el futuro aspirar a lograr su participación en unos Juegos. Una semana antes de saborear la gloria en la cita mundialista celebrada en Vigo, Manu Weiller, que este año ya condujo al «Rex Motors» al título en el Campeonato de España de la clase Platu, vio como se le escapaba la victoria en el Mundial universitario, por lo que el triunfo supone una doble alegría y alcanzar la cota más alta posible en este deporte.