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GRAN CANARIA 63
VIVEMENORCA 56

GRAN CANARIA (6+22+14+21): David (6), Savané (3), Norris (3), Moran (2) y Guerra (7) -cinco inicial-, Vroman (10), Fernández (17), Hunter (8), Baldo (0) y Pérez (7).

VIVEMENORCA (19+9+12+16): Moss (4), Stojic (6), Rodríguez (3), Clancy (22) y Farabello (0) -cinco inicial-, Bazdaric (5), Yánez (6), Brown (9) y Llorens (1).

Àrbitros: Pérez Pérez, Sánchez Monserrat y Rosado. Fue eliminado Stojic (min. 38).

Efe|LAS PALMAS

El Gran Canaria Grupo Dunas superó 'in extremis' al ViveMenorca para anotarse su quinto triunfo en la Liga -tercero consecutivo-, con una exhibición del base catalán Mario Fernández, quien se lució ante su ex equipo, con el que consiguió el ascenso a la Liga ACB. En el primer cuarto, el Gran Canaria simplemente no existió, ya que deambuló en un mar de confusiones ante un rival que se limitó a aprovechar su cúmulo de despropósitos, con un juego muy torpe en defensa y totalmente nulo en ataque.

Nacho Rodríguez lideró el juego menorquín para que sus compañeros Moss y Stojic pusieran los puntos (6-19). Los anfitriones sólo se metieron en el encuentro cuando la desventaja creció hasta unos peligrosos dieciséis puntos (8-24). El Gran Canaria despertó entonces de la mano del barcelonés Mario Fernández y del alero madrileño Sergio Pérez. Un parcial 6-0 y personal en ataque obligaron al técnico visitante, Javier Àlvarez, a solicitar tiempo muerto, pero sus jugadores, que parecían no creer en sus posibilidades, no salieron del letargo y encajaron otros once puntos consecutivos.

Un tiro libre y un mate del pívot estadounidense Jackson Vroman pusieron por primera vez al Grupo Dunas por delante en el marcador (25-24). Sólo en la recta final del periodo reaccionó el ViveMenorca, de la mano de Nacho Yánez, y el 28-28 al descanso premió los méritos de unos y otros, que se repartieron errores y acierto en proporciones idénticas. En la segunda parte, unos certeros Clancy y Brown se encargaron de mantener al conjunto balear en el choque ante el discontinuo rendimiento local. Las precipitaciones del Grupo Dunas chocaron con los cambios defensivos del ViveMenorca.