Rafael Nadal emprendió ayer viaje de vuelta a España y lo hace dolorido aún por su lesión en la pierna izquierda, en busca de una resonancia magnética que aclare el alcance de la misma, pero convencido que no será nada grave. El tenista mallorquín lamenta no haber podido alcanzar su sueño de ganar el Open de Australia y estudia sus opciones de poder competir en la Copa Davis.
El jugador fue visitado ayer por el médico del torneo durante 15 minutos, pero desistieron de hacerle una ecografía porque no aclararía demasiado al respecto al encontrarse la lesión en un sitio muy profundo. Sí le diagnosticaron que se había producido en la inserción del isquio con la rama isquiopubiana, pero falta determinar si se trata de la lesión primaria o es la secundaria.
«Creo que no es muy importante», dijo Nadal, «pero nunca se sabe», añadió el jugador que ayer se levantó tarde, como acostumbra, pero sintió dolores una vez que estuvo de pie.
«Me sigue doliendo. No sé exactamente lo que es hasta que vaya a Mallorca y me hagan la resonancia, y confío que no sea nada grave. No lo va a ser porque no noté pinchazo alguno, pero en algunos movimientos la pierna me falla», añadió.
El médico del torneo le ha recetado ibuprofeno (un analgésico) y que estire suave con su fisioterapeuta Rafael Maimó hasta hacerle la resonancia. Rafael Nadal ha preferido viajar a Mallorca en vez de Barcelona porque echa de menos estar ya en casa. «Llevo ya un mes fuera y allí hay gente que me lo puede hacer perfectamente», dijo.
En la revisión de ayer el médico evaluó los movimientos de Nadal y se percató de que a la hora de forzar hacia atrás al jugador le dolía. «No podía», dijo Nadal, «a la hora de agacharme también me duele».
Maimó ha estado en comunicación telefónica con el doctor de la Federación Española y médico de confianza de Nadal, Angel Ruiz Cotorro. «El doctor ha confirmado el lugar de la posible lesión pero a Rafael le sigue doliendo, molestando y hay que esperar a lo que dice la resonancia», dijo Maimó.
«Rafa tiene, no sólo molestias atrás sino en la parte externa e interna. No se puede descartar un problema en otros sitios», puntualizó Maimó que apenas ha tocado al jugador desde el partido. «Ahora si nos ha dicho el médico que podemos aplicar algo de terapia de masaje, y que podemos movilizar».
Con ese tratamiento y con antiinflamatorios, y si acaso un analgésico, por si el dolor aumenta, Nadal emprendió el viaje de vuelta a Mallorca.
Cuando haya sido sometido a la resonancia y los médicos determinen el alcance real de la lesión, Rafael Nadal volverá a estudiar su calendario. La primera eliminatoria de la Copa Davis que enfrentará a Suiza y a España está a la vuelta de la esquina y Emilio Sánchez Vicario eligió al mallorquín como el número uno de su equipo. El jugador balear confía en poder recuperarse a tiempo y conseguir que España pase a cuartos de final.
De todas maneras, lo más importante para Rafael Nadal es recuperarse bien de la lesión ya que en marzo comienza el tramo más complicado del calendario ya que llegarán prácticamente de manera consecutiva Indian Wells, Miami, Montecarlo, Conde de Godó, Roma, Roland Garros y Wimbledon y para estas citas es vital estar al cien por cien físicamente.
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