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Efe|ROMA
El delantero brasileño del Milán Ronaldo aseguró ayer que «no está acabado» en su primera rueda de prensa como jugador del equipo italiano. «La decisión de venir al Milán representa para mí un reto para mostrar que no estoy acabado», dijo el ahora rojinegro, tras dejar el Real Madrid. Para Ronaldo, volver a Italia y a la ciudad en la que ya jugó antes, aunque con el equipo rival, supone «un desafío excitante» que se dispone a vivir después de unas «negociaciones realizadas en momentos difíciles». Y destacó: «El reto ha sido siempre la cosa más importante en mi vida. En otras ocasiones he rechazado el dinero por el desafío deportivo. Esta vez ha sido así. Tenía una oferta de los Estados Unidos y otra de Arabia; podía haberme quedado en el Madrid, pero he elegido este reto para mostrar que mi historia no está acabada».

El brasileño dejó claro que para él, «como para cualquier jugador, es un sueño vestir la camiseta del Milán», aunque pidió a los aficionados de la ciudad que lo respeten. Sobre su anterior paso por el Inter, Ronaldo afirmó que también fue «una historia bellísima, que acabó mal», ya que fue «vendido porque así lo exigió el entrenador». En cuanto al presidente y accionista de referencia del Inter de Milán, Massimo Moratti, y a todos cuanto se han sentido ofendidos por su regreso a la ciudad pero al equipo rival, Ronaldo ha comentado que le desea «buena suerte», aunque dijo que no le interesa «lo que dicen en la otra parte» y que espera «el respeto de la gente».

«Estuve cinco años en Milán y fue bellísimo. Tengo tantos amigos en esta ciudad», prosiguió antes de comentar: «Veré cómo me acoge la ciudad cuando pasee por la calle o vaya a tomar un café. Yo pido sobre todo respeto; quien no me quiera no debe por ello hacerme daño», dijo. Además, se mostró dispuesto a hacer todo lo posible para «conquistar» a los aficionados. «Tengo muchas ganas de ser querido para así convencer a los aficionados que el Milán ha hecho una buena inversión», agregó. Respecto al Real Madrid y su entrenador, Fabio Capello, Ronaldo ha afirmado no haber tenido «nunca« un problema con él, «aunque parezca una broma». «El no ha tenido confianza en mí; no me ha dicho el porqué, porque yo nunca se lo he preguntado. Es una historia corta, fea y triste, pero es así». Tras ese repaso a su carrera en los dos equipos europeos, Ronaldo reconoció que las despedidas del Inter y de Real fueron «ambas difíciles».