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Albert Orfila/Miquel Alzamora
Definitivamente, Angel María Villar ha declarado la guerra a Mateu Alemany. El presidente de la Española de fútbol (RFEF) ya tiene claro quien será su gran adversario en la próxima carrera electoral y no ha tardo en mover pieza. Villar quiere prender fuego a la candidatura de Alemany en su propia casa y desde hace días medita la posibilidad de ofrecer un cargo de directivo a Vicenç Grande. El mandatario de la RFEF tiene previsto viajar el miécoles a la Isla para presenciar el partido de vuelta de la final de la Copa Federación y todo apunta a que aprovechará su desplazamiento para «captar» a Grande y lanzar una seria advertencia a Alemany. Villar sabe que si logra incluir al propietario del Mallorca SAD en su equipo de trabajo, desacreditaría notablemente la candidatura de Mateu Alemany Font, que ante el gran público y el fútbol español perdería apoyos en el que debería ser su gran feudo. ¿Cómo podría entenderse que el Real Mallorca no respaldara la cantidatura de Alemany?

Balears siempre ha sido «villarista». Lo fue durante la larga estancia de Antonio Borrás del Barrio, que tras ser inhabilitado encontró acomodo en Madrid. Miquel Bestard, el actual presidente, también apoyó a Villar en los últimos comicios, donde el dirigente vizcaino se enfrentó a Gerardo González y a Sebastián Losada y salió victorioso. Para Miquel Bestard, la presencia de Mateu Alemany en la próxima carrera electoral supondrá una enorme disyuntiva. El presidente de la Balear de fútbol (FFIB) ha sido fiel a Villar a lo largo de los últimos años, aunque también ha tenido que convivir con las continuas «traiciones» de Borrás del Barrio, un personaje al que Villar siempre ha arropado. Bestar mantiene unas excelentes con Vicenç Grande, aunque también con Mateu Alemany, a quien profesa una gran admiración. ¿Villar o Alemany? Miquel Bestard deberá posicionarse y tomar una decisión en los próximos meses.

Aunque el pasado miércoles ya estuvo en Pontevedra y presenció en directo el encuentro de ida de la Copa Federación (4-1), su nueva visita a Mallorca ha generado una gran sorpresa y ha desatado todo tipo de elucubraciones. El peso que tienen los clubes en unas elecciones a la presidencia de la RFEF siempre es relativo. Es importante contar con aliados en la LFP, pero son los votos de las Federaciones territoriales las que siempre inclinan la balanza. Históricamente, Angel María Villar siempre ha tenido de su lado a una gran parte de las delegaciones autonómicas, aunque también sabe que su figura se ha desgastado sobremanera durante los últimos años y que Mateu Alemany tiene capacidad para encontrar aliados entre algunas territoriales que han empezado a recelar de la gestión del actual presidente.