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Decía Rafael Nadal que ya que tenía que perder alguna vez mejor hacerlo contra Roger Federer. Y el número uno del mundo cortó ayer la mejor racha de victorias consecutivas de la historia de la ATP. 81 truinfos seguidos después, el tenista mallorquín perdió sobre tierra batida. El suizo por fin conseguía doblegar al zurdo de Manacor en una pista de arcilla, una semana antes de que levante el telón Roland Garros.

Desde que Igor Andreev le eliminara en los cuartos de final del Torneo de Valencia de 2005, Rafael Nadal no sabía lo que era perder sobre tierra batida. El mallorquín se convirtió en el mejor jugador de todos los tiempos sobre esta superficie. En sus 81 victorias consecutivas se alzó con dos títulos en Roland Garros, se impuso en las tres últimas ediciones de Montecarlo, Barcelona y Roma, ganó en Bastad y Stuttgart y mantuvo a España en el Grupo Mundial de la Copa Davis.

En estos tres años ha batido todos los récords. Ha superado a Thomas Muster, Bjorn Borg, Guillermo Vilas. Y ha dejado el récord en 81 victorias consecutivas, una cifra que va a ser complicado que alguien pueda superar. En estos 81 partidos, Rafael Nadal había superado a un buen puñado de jugadores top ten, aunque con el tenista que más veces se había medido era Roger Federer. El mallorquín derrotó en cinco ocasiones al suizo, todas en encuentros muy importantes.