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Efe|PEKÍN
Brigit Yagüe dio ayer aún más brillo a su hoja de servicios y conquistó el oro mundial tras una competición en la que tuvo que emplearse a fondo tras un sorteo que le deparó combates muy comprometidos. La mallorquina, que ganó el Mundial de Alemania en 2003 y fue subcampeoan en Madrid'05, subió a lo más alto del podio en Pekín, precisamente en el mismo escenario en el que se celebrarán los Juegos, donde Yagüe ya ha puesto pie y medio.

El himno español sonó por partida doble ayer en el Estadio Changping en honor de los dos nuevos campeones del mundo, Juan Antonio Ramos y Brigit Yagüe, oro ambos en las categorías masculina y femenina de peso mosca de los Mundiales de taekwondo de Pekín. Con este resultado España asciende al segundo puesto del medallero, sólo por detrás de la siempre intratable Corea del Sur, lugar de origen del taekwondo y primera potencia mundial.

Brigit Yagüe, también peso mosca, hizo buenos los deseos de su novio y se impuso en la final a la croata Ana Zaninovic en un complicado y gran combate que supo manejar hasta el final. «Estoy muy contenta. No empecé bien el campeonato. Estaba rápida pero floja y dudé mucho pero poco a poco me he ido encontrando mejor. Ahora a ver si voy a los preolímpicos (que se disputan en Manchester en septiembre)», señaló Yagüe con la bandera nacional sobre los hombros.