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Es un secreto a voces que puede desvelarse en cualquier momento. La intención era hacerlo tras el Gran Premio de Holanda, pero todo epaddock y los aficionados ya tienen claro que en 2008, Jorge Lorenzo montará una Yamaha y rodará en MotoGP. Es un episodio más de un relevo generacional en el que el campeón (y más que probable bicampeón) del cuarto de litro juega un papel clave. Casey Stoner y Dani Pedrosa, viejos compañeros en 125 y 250 centímetros cúbicos, se le anticiparon, pero al piloto mallorquín le ha llegado la hora de afrontar uno de los mayores retos que se le plantea en poco más de cinco años en el Campeonato. Su actual cilindrada se le ha quedado pequeña y en Yamaha ya suspiran por contar con el concurso del verdadero animador del Mundial, tal y como afirmó Lin Jarvis al destapar el interés de la marca de los tres diapasones por el pupilo de Dani Amatriaín.

Lorenzo, líder indiscutible de 250 (con 23 puntos sobre Dovizioso y De Angelis), dejó ver que en Brno se podrían saber más cosas sobre su futuro, pero el hecho de que su marcha a Yamaha se haya convertido en vox populi y la presión de los medios obligaría a anticipar la confirmación de un rumor con mucha sustancia. Con Lorenzo rodando sobre una 800, el fabricante nipón se asegura un relevo de garantías de cara al futuro para el más grande. Valentino Rossi tendría así un escudero de lujo. Ambos pilotos se han deshecho en elogios el uno hacia el oro -la foto en Montmeló resultó algo más que una evidencia- y están llamados a compartir box en la temporada 2008 con una moto oficial como nexo.

La maniobra en la que Jorge sería actor principal es un calco de la protagonizada por Ducati y Honda con Casey Stoner y Dani Pedrosa como estiletes. Dos jóvenes pilotos, con calidad y sed de victorias que anticipan un porvenir apasionante en la categoría reina. Con Lorenzo protagonizaron carreras apasionantes y, por ello, en MotoGP el espectáculo parece garantizado. El balear, piloto de referencia de Aprilia, no será el único que dé el salto. Alex de Angelis, probablemente con Suzuki y 'Aspar' al mando, y Andrea Dovizioso (Honda) también tienen en mente seguir los pasos de Jorge. Pero por detrás, además de la guerra por la sucesión de Lorenzo protagonizada por Bautista, Luthi, Kallio, Aoyama y compañía, se deja ver que en un par de temporadas, se puede completar el relevo de los Capirossi, Checa, Barros, Edwards y demás. MotoGP promete, y con Jorge Lorenzo, mucho más todavía si cabe.