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El ViveMenorca ya se encuentra en Vitoria, donde pretende truncar el nefasto balance que arrastra en sus compromisos lejos de la isla a costa del Tau (hoy, 12.30, IB3). Desde comienzos de noviembre que no saborea un triunfo foráneo el grupo de Ricard Casas, y aunque sobre el papel pocos son los argumentos que vaticinan posibilidades de éxito, algunos precedentes del rival gasteiztarra durante el presente ejercicio, unido a la buena línea de juego mostrada por los nuestros en las últimas jornadas, permiten albergar ligeras ilusiones para la sorpresa. El siempre duro viaje a la capital alavesa "dos vuelos y un trazado de casi 100 kilómetros en autobús hasta el punto de destino", dio paso, nada más llegar, a una suave sesión sobre el parquet del majestuoso «Fernando Buesa Arena», que se repitió por la tarde. Con las conocidas ausencias de Cazorla y Bazdaric "se estima que, como mínimo, permanecerán dos semanas más alejados de las pistas", el cuadro balear opta hoy a un triunfo que, en caso de apuntarse, significaría una de las grandes alegrías de la temporada.

A los problemas físicos de los dos exteriores, hay que añadir las molestias de Paul Shirley y el hecho de que Guzmán y Jesús Fernández, por distintos motivos, no hayan podido trabajar durante la semana a idéntico ritmo que el resto. No obstante, ni el pívot americano ni los dos nacionales se perderán el duelo de hoy.

La enfermería del Tau tampoco anda para tirar cohetes. Lesionado desde la pretemporada Singleton, el alero Mickeal sigue en el dique seco, mientras que en las recientes fechas Rakocevic y Prigioni también han padecido problemas. El serbio no jugó en Thesalónica, aunque el argentino sí saltó a la cancha ante el Aris.

Además, tampoco los recuerdos menorquines en Vitoria son excesivamente alentadores. A la derrota cosechada en el año de su estreno en ACB (86-82), el Menorca debe sumarle el descalabro sufrido hace ahora un año, cuando los de Casas fueron vapuleados por un escandaloso 96-59 en el curso pasado. Aunque la mayor incertidumbre es ¿qué Tau veremos?; el que superó sin inmutarse al Aris de Thesalónica en el mítico «Alexandrio», ofreciendo todo un catálogo de recursos defensivos, o el que palideció en labores de contención en Madrid ante el MMT Estudiantes. La respuesta a tan complicado jeroglífico la conoceremos hoy. En cualquier caso, nadie se plantea siquiera, el evocar al precedente del pasado año como referencia válida. En Vitoria, el Menorca se cuelga de la esperanza.