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Con la permanencia archivada en el cuaderno de bitácora del curso, un puñado de jugadores estudiando las ofertas con sus representantes y el bañador preparado ya en la maleta, el Mallorca (12º, 44 puntos) apela a los retos personales para motivarse en el encuentro de hoy ante un Racing (5º, 53 puntos) que se presenta en la Isla con los mejores números de su historia y la posibilidad de clasificarse por primera vez para las competiciones europeas (ONO Estadi, 17.00 horas).

En tierra de nadie, el grupo de Manzano busca motivaciones extras para mantener el aliento en estas cinco últimas jornadas. En el transfondo del choque, aparecen varios datos para coleccionistas. El primero apunta a Güiza. El vestuario del Real Mallorca se ha conjurado para empujar al delantero jerezano hasta la conquista del Trofeo Pichichi. El '14' bermellón ya suma 21 goles, persigue al brasileño Luis Fabiano y quiere cerrar un regreso extraordinario. Porque nadie duda ya que el jerezano no seguirá en la Isla a partir del próximo 30 de junio. Es mejor asumirlo y comenzar a diseñar el curso próximo sin Dani en la pizarra. Su cláusula de rescisión (15 millones de euros) se antoja un dulce irresistible para los clubes de la zona media-alta.

Pero antes de esa fecha de caducidad, Güiza pretende marcar el máximo número de aciertos posibles y, de paso, reencontrarse con el gol en casa, donde 'sólo' ha sellado 5 dianas.

El gaditano se enfrentará a un doble reto. Delante tendrá a Toño, que ha pasado de ser un portero desconocido a pugnar por el Trofeo Zamora junto a Casillas y Valdés. El racinguista ha encajado 21 goles en 26 partidos, un promedio de 0'80 goles por partido. Una barbaridad.

A estas alturas del año, la munición de todos está a punto de caducar. A Manzano le faltarán de nuevo Ramis y Ariel Ibagaza, que se perderán su tercer partido consecutivo, y Lionel Scaloni, operado esta semana y que permanecerá en la enfermería hasta la pretemporada.

Marcelino, por su parte, no podrá contar con el sancionado Serrano y los lesionados Garay y Luis Fernández. Jordi López tampoco está disponible por el contrato de cesión firmado por el Racing con el club balear. Tampoco es una ausencia que trastoque los planes, ya que el pivote catalán, que debe regresar a Ciutat en verano, apenas cuenta para el cotizado técnico asturiano.

Manzano calcará el once que arrasó al Murcia (1-4) con Moyà bajo los palos; Héctor, David Navarro, Nunes y Fernando Navarro en defensa; Basinas y Borja Valero en el doble pivote con Varela y Arango por las orillas; Webó y Güiza en la vanguardia. Aguardarán su oportunidad en el banquillo Germán Lux, Molinero, Castro, Tuni, Jonás, Trejo y Ballesteros, que suple en la lista al canterano Alberto, debutante en la Nueva Condomina y que ayer cayó con el equipo nodriza en Son Bibiloni ante el Atlètic Balears.

Aunque no es probable, las matemáticas le conceden al Mallorca alguna posibilidad de finalizar la jornada en la novena plaza. Si el conjunto isleño gana hoy al Racing y tropiezan Betis, Athletic o Espanyol, afrontaría los cuatro últimos capítulos del curso en el furgón central de la categoría.

Aunque el Mallorca colecciona elogios tras sus últimas citas a domicilio (0-3 en Valencia y 1-4 en Murcia) parece atascado en casa. El empate ante el Real Madrid (1-1) y la derrota frente al Sevilla (2-3) estropearon una segunda vuelta notable. El Racing no es precisamente una perita en dulce. Con opciones de Champions -está a un punto del Atlético, que juega hoy en Getafe- espera mantener su buena racha a domicilio, donde presenta sólo dos derrotas (Nou Camp y Coliseum) en la segunda vuelta, para seguir alimentando su sueño.

El burundiano Mohammed Tchité y los ex mallorquinistas Jorge López y Gonzalo Colsa son algunas de las piezas más cotizados de este Racing que está reescribiendo su propia historia con la pluma de Marcelino, un técnico que huele a equipo grande.