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Tolo Jaume El recién estrenado proyecto de baloncesto mallorquín al que dieron forma Inca y Muro encendió la bombilla y las gestiones ya están encauzadas para que vea la luz una entidad similar para el voleibol de la Isla. La iniciativa surge ante la ausencia de patrocinadores y a la espera de que se confirme el intercambio de la plaza que llevará a cabo el Ícaro Palma con el IBSA canario por el que el subcampeón de la Superliga femenina pasaría a competir en la segunda categoría nacional. Así las cosas, la estructura del Drac Palma, que trabaja actualmente sin sponsor como Club Voleibol Pórtol, se presume como el buque insignia de una organización que asumiría el club que preside Carlos López bajo una denominación aún por confirmar.

Los clubes de la Isla han tenido que echar mano de la imaginación para encontrar una salida a la situación de desaceleración económica que ha propiciado la desvinculación de muchas empresas del mecenazgo deportivo. El vigente campeón de la Superliga masculina ya se ha despedido de la denominación de Drac Palma y el subcampeón de la Superliga femenina prevé intercambiar su plaza con el IBSA ante las dificultades para reunir un presupuesto suficiente para competir con garantías en la máxima categoría. Ante esta situación y con el precedente reciente del nacimineto del Bàsquet Mallorca, el voleibol esboza una solución con visos de convertirse en realidad en los próximos días.

La idea que surgió desde los despachos de la conselleria de Esports del Govern que comanda Mateu Cañellas se ha convertido en la mejor salida para un voleibol que corría el riesgo de no poder mantener las prestaciones de las que había podido presumir en las últimas campañas.

El Ícaro Palma se vio obligado a renunciar a participar en la próxima edición de la Liga de Campeones después de haberse ganado la clasificación en la pista como subcampeón de la Superliga femenina. El club que preside Carlos López ha agotado todas las vías en busca de apoyos en las últimas semanas, pero finalmente la solución menos dolorosa ha sido el intercambio de la plaza con el IBSA Voley. El conjunto canario regresará a la Superliga femenina a costa del Ícaro Palma, que pasará a competir en el segundo escalón del voleibol nacional.

El conjunto que mantendrá como entrenador a Ernesto Rodríguez será el primer equipo de la sección femenina del nuevo club, donde el antiguo Drac Palma seguirá defendiendo su posición de vigente campeón en la Superliga masculina. El equipo que seguirá entrenando el técnico argentino Marcelo Méndez no ha detenido la actividad y se ha apresurado en confeccionar la plantilla del próximo curso, mientras que en el caso del conjunto femenino todas las operaciones se habían paralizado y ahora comenzará el diseño del plantel del próximo curso.

El presidente del Club Voleibol Pórtol, Ricardo Ramos, se presume como el máximo responsable de una entidad que aún debe terminar de perfilar su organización interna tanto en los despachos como en las categorías inferiores. El presidente del Ícaro Palma, Carlos López, podría desvincularse de la nueva entidad tras el desgaste al que se ha visto sometido en las últimas semanas y tras haber expresado su malestar por los obstáculos con los que se ha topado en una temporada histórica para el voleibol femenina de la Isla.

La conselleria de Esports hizo especial hincapié en la importancia de las categorías inferiores en el proyecto de baloncesto y mantendrá la misma filosofía para el proyecto de voleibol que ya ha mantenido contactos con el director general de Esports, Biel Gili. Sólo falta dar formalidad a una propuesta bien encaminada que permitirá mantener el status de Mallorca entre la élite del voleibol tras acumular varias temporadas de ensueño.