El Atlètic Balears regresó de vacío de su choque con el Barcelona Atlètic en el Mini Estadi cuando todo parecía indicar que a falta de cuatro minutos para el final del mismo se llevaría un punto del que se había hecho acreedor. En ese momento apareció Maric para tirar por tierra todo el trabajo realizado por el conjunto blanquiazul hasta ese momento.
Toni Cazorla dispuso sobre el terreno de juego un once en el que la principal novedad fue la presencia de tres jugadores en el centro del campo para intentar frenar el juego de creación azulgrana, lo que provocó que el hombre más adelantado del equipo fuera José Blázquez en solitario.
En los primeros compases del partido, el conjunto dirigido por Luis Enrique se hizo con el mando del mismo y movió rápido el balón aunque sin encontrar profundidad ni crear ocasiones de gol. A pesar de ello, en una acción aislada, el balón le llegó a Víctor Vázquez, y su centro desde la derecha se paseó por la frontal hasta que en el segundo palo apareció Nolito para ajustar el balón junto al palo haciendo inútil la estirada de Emilio.
Los isleños no se vinieron abajo y sólo seis minutos después, por mediación de Blázquez, reestablecieron la igualada, logrando así el primer gol del equipo en el presente campeonato. Fran Grima encontró a Charles en un saque de banda y éste le puso un balón a Blázquez que le dejó sólo ante Oier, al que batió por arriba.
Con el empate se llegó al descanso, y en la segunda mitad, los locales buscaron con más insistencia el gol de la victoria. El Atlètic por su parte se defendió con mucho orden pero no pudo evitar el segundo tanto azulgrana, obra de Maric, a cuatro minutos para el final, al rematar un centro desde la izquierda.
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