TW
0
F.Fernández No ha pasado una semana desde su aterrizaje en Portland y Rudy Fernández ya se ha adaptado plenamente a la vida en Oregón. A la búsqueda de una casa que le convenza -en compañía de su inseparable madre, Maite, y de su agente, Gerard Darnés-, a los mandos de un BMW X5 y ejercitándose sin parar en el Rose Garden (suele ir de 8 de la mañana hasta pasada la hora del almuerzo), el crack mediático de los Blazers cuenta las horas que restan para el inicio de la pretemporada de su franquicia (29 de septiembre revisión médica y el día 30 primer entrenamiento a las órdenes de Nate McMillan) y para su estreno (7 de octubre, Rosea Garden, frente a Sacramento Kings). Mientras, el escolta mallorquín bromea y dice sentirse «un poco estresado», pero a la vez «ansioso porque empiece la temporada». Entrenar por la mañana, sondear el mercado inmobiliario de la capital de Oregón y atender a los compromisos publicitarios e institucionales forman au agenda, aunque ya parece plenamente asentado en su nuevo hogar. «Los Blazers son como una familia, hay muy buen ambiente. Sergio (Rodríguez) me está ayudando mucho, Brandon (Roy) también...», dijo Rudy en el programa 'Trail Blazers Courtside', uno de los platos fuertes de la emisora oficial de la franquicia. «Portland ha confiado en mí y quiero ir con ellos a los playoffs. Tenía ofertas más importantes económicamente en Europa, pero jugar en la NBA era mi sueño y tengo la suerte de haber encontrado un equipo joven, ambicioso, con gente como LaMarcus (Aldridge), Brandon (Roy) o Greg (Oden)», añadió.

Poco a poco, Rudy perfecciona su inglés, pero promete que «en tres meses mejoraré», y destaca que Sergio Rodríguez y el técnico Bob Medina son dos de sus apoyos en un aspecto que «en Europa no es un problema para los estadounidenses, ya que allí los clubes les dan todo tipo de comodidades. Aquí, tienes que buscarte la vida, y eso me motiva más», comentó Rudy ante su afición.