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Geca Sport|LEÓN
Diferentes objetivos se ponían en liza ayer en León. Los locales se jugaban una victoria necesaria para transmitir la sensación de favoritos en la competición y convencer a una escéptica afición mientras el conjunto isleño buscaba un triunfo para salir de la zona peligrosa, territorio en el que, a tenor de lo visto en la cancha, se van a mover durante toda la temporada.

Los baleares comenzaron el encuentro con una defensa individual en toda la cancha y gracias al ímpetu mostrado y el acierto de Keep consiguieron las primeras ventajas en el tanteador. El conjunto local daba cumplida réplica como consecuencia de la buena dirección de Bernabé y la potencia física de Báez. El marcador reflejaba la realidad de un encuentro igualado y con muy pocas canastas por el continuo desacierto.

A dos minutos para el final de la primera parte, los mallorquines ponían el empate en el marcador con una canasta bajo el aro de Orfila. Las alarmas saltaban.

El partido era un querer y no poder para el León tras la reanudación, Mallorca se mantenía pegado en el marcador gracias a la intensidad defensiva y reboteadora de Keep y al inspirado día de Blair que demostró ser el jugador más en forma de los de Sastre. Bernabé era la única luz en un partido demasiado oscuro. A falta de tres minutos para el final del tercer cuarto el base leonés anotaba un triple que situaba a los visitantes a diez puntos, demasiado para un equipo sin recursos que las ocurrencias de Blair o el oscuro trabajo de Keep.

A partir de ahí todo fue muy sencillo para el Grupo Begar León que se dedicaba a hacer circular el balón de forma perfecta hasta que maduraba un tiro que, en la mayoría de las ocasiones salía repelido por el aro y acababa en las manos de Keep. No corría mejor suerte Mallorca que se mostró totalmente espeso en ataque. Los dos equipos mostraban lo peor de su repertorio en un partido que ambos conjuntos harán bien en olvidar. Mientras, Blair seguía a lo suyo, espoleando sus compañeros a base de buenas acciones. El arreón balear les situaba sólo seis puntos por debajo tras haber estado trece, Sin embargo, no fue más que un espejismo que afiló aún más las garras de un, por momentos, fiero León. Los de casa se pusieron once arriba antes de que Mallorca pudiera atisbar la victoria en el horizonte.

En definitiva, León supo sobrevivir en la mediocridad siendo el menos malo de un encuentro pésimo.