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Efe |MADRID
El Polideportivo Ejido, que dejó en la cuenta al Villarreal sin caer en ninguno de los dos encuentros, se unió al Real Unión de Irún, que el martes eliminó al Real Madrid, como las dos grandes «sorpresas» de las eliminatorias de los dieciseisavos de final de la Copa del Rey.

Al Poli Ejido y al Real Unión de Irún, además, les une el ser los dos únicos conjuntos de la Segunda división B en acceder a los octavos de final de la competición copera y, asimismo, tras eliminar a dos de los equipos que pasaban por entrar en el grupo de los grandes favoritos para hacerse con el título.

El Villarreal no sólo no pudo remontar el adverso 0-5 de la ida, lo que se antojaba muy difícil pese a las dos divisiones de diferencia existentes entre ambos clubes, sino que incluso ni siquiera pudo llevarse en la vuelta un triunfo que «maquillase» su eliminación a manos del Poli Ejido.

Y es que el Poli Ejido volvió a realizar una gesta que pudo ser mayor: se adelantó en el marcador y, al final, sacó un empate en su visita al Villarreal (1-1) que pudo haber sido un nuevo triunfo si Nakor (m.79) hubiese atinado en una pena máxima que lanzó mal y detuvo el meta Viera.

Sufrió de lo lindo el Atlético de Madrid, que cedió un empate sin goles en casa ante el Orihuela y pasó merced al gol anotado por el uruguayo Diego Forlán que le dio el triunfo en la ida (0-1).

Los últimos minutos fueron de infarto en el Vicente Calderón, pues el Orihuela estuvo cerca de lograr el tanto que igualara la eliminatoria, y forzara la prórroga, en el minuto 90, pero lo evitó el meta francés atlético con una notable intervención.

Al Barcelona, que ante el Benidorm también llegaba con el favorable 0-1 de la ida y que puso en liza a buena parte de sus «pesos pesados», tampoco le fueron las cosas muy de «color de rosa».

El Benidorm, también de la Segunda B, se le subió a las barbas, pudo haber marcado en los primeros minutos, mandó un balón al poste (m.23) y, en la segunda mitad, también dispuso de sus oportunidades. El técnico barcelonista tuvo que dar entrada a Xavi y Etoo y el tanto del 1-0 definitivo llegó en los pies del argentino Leo Messi (m.86), al recoger un rechace de una pena máxima por él mismo lanzada y desviada por el buen meta visitante.