En los primeros instantes el jugador recibió la atención del doctor Munar e intentó regresar al terreno de juego, pero los síntomas de mareo y pérdida de consciencia obligaron al jefe de los servicios médicos del club balear a tener que pedir el cambio. En su lugar entró al terreno de juego Iván Ramis.
Navarro abandonó el estadio en camilla, y fue trasladado a un hospital de Valladolid. El primer diagnóstico indicó que se trastaba de un fuerte golpe en la zona de la ceja, pero se decidió por precaución que el futbolista pasará la noche en observación en un hospital vallisoletano donde se le realizaron diferentes pruebas para comprobar su estado físico y descartar una lesión que revistiera mayor gravedad. De confirmarse que se trata sólo de una fuerte contusión, David Navarro regresará hoy a Palma, tal y como lo confirmaba Gregorio Manzano en la rueda de prensa posterior al partido en el Nuevo Zorrilla. El entrenador andaluz relataba que no fue un momento fácil de digerir para el resto de sus compañeros ya que en el descanso se desconocía el alcance de la lesión.
«Es una situación del juego en que no pasa nada cuando se lesiona un jugador, pero esa imagen en el descanso con David en una camilla no es nada agradable y es un poco duro para todos los compañeros», comentó el entrenador del Real Mallorca.
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