Miquel Bestard y Ángel María Villar posan con la Eurocopa conquistada el pasado año en Austria.

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Carlos Montes de Oca

Miquel Bestard, presidente de la Federació de Futbol de les Illes Balears (FFIB), ha recogido el guante lanzado por el Real Mallorca y está dispuesto a hacer «todo lo posible» para normalizar las relaciones entre el presidente de la Real Federación Española de Fútbol, Angel María Villar, y el máximo mandatario de la SAD balear, Mateo Alemany, adversarios en la carrera por la poltrona de la Española el pasado año.

Tal y como informó ayer Ultima Hora, el Mallorca se ha dirigido al máximo responsable del fútbol balear para que intente organizar una reunión que sirva para allanar las relaciones entre su jefe y el presidente del Mallorca. El vicepresidente del club isleño, José Miguel García, y otros consejeros más de la entidad, entre ellos Miquel Vaquer, ya dialogaron con el dirigente bunyolí la semana pasada durante el transcurso del encuentro de ida de los cuartos de final de la Copa del Rey que el conjunto bermellón disputó en el Camp Nou ante el Barça. Y el presidente de la FFIB está dispuesto a todo para ayudar al Mallorca.

«Haré todo lo posible para colaborar en normalizar la situación», subrayó ayer a este periódico el máximo responsable de la Balear.

La idea nació del consejo de administración del Real Mallorca. El aterrizaje de Mateo Alemany en la presidencia ha coincidido con una serie de arbitrajes nefastos para los intereses del equipo bermellón, que unido a la delicada situación clasificatoria, ha generado una corriente pesimista en torno a la Española y a los árbitros que la SAD balear quiere reconducir lo antes posible. Para Bestard, se trata de una simple casualidad: «No creo que ningún árbitro salte a un terreno de juego predispuesto a perjudicar a este o aquel equipo porque su presidente, en este caso Alemany, se lleva mejor o peor con Villar. Me niego a creer que esto sea así porque, en ese caso, me iría a mi casa. Los colegiados, como humanos que son, se equivocan como los jugadores. A veces te favorecen y otras te perjudican. Pero hablar de una campaña anti-Mallorca me parece absurdo».

La intención de los rectores del club es mantener un cónclave con el presidente de la RFEF para tratar de normalizar la situación. En principio, ni Villar se desplazará a la Isla ni Alemany viajará hasta Madrid, ya que el propósito es que la reunión se celebre en terreno neutral, aprovechando un compromiso de la selección española o algún acto que reúne a ambos presidentes.

A pesar de que Miquel Bestard acudió ayer a Sevilla para presenciar el partido entre España e Inglaterra, no pudo dialogar con Àngel María Villar, al encontrarse el presidente de la Española en Nigeria para conseguir que la candidatura conjunta con Portugal logre la organización del Mundial 2018. No obstante, en las próximas semanas Villar comenzará a estudiar la propuesta del Real Mallorca, aunque es previsible que ésta no se haga pública para no provocar las suspicacias en algunos de los otros equipos implicados en la lucha por la supervivencia en la máxima categoría.