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Las luces de alarma se han encendido en el vestuario del Real Mallorca. La lesión de Dudu Aouate, uno de los cimientos que sujetaban la reacción isleña en esta segunda parte del campeonato, llega en el momento más inoportuno del curso y con una porción notable de la permanencia en juego. Con Miquel Angel Moyà ultimando su recuperación y el israelí en la camilla durante al menos 10 días, el futuro mallorquinista queda en manos de Germán Lux, cuya tarjeta de presentación bajo los palos isleños no invita al optimismo.

En el encuentro del pasado sábado, ante el Athletic, agrandó su leyenda negra. Fue pisar el campo, encajar gol y perder. Una vieja costumbre. De hecho, el Mallorca no ha ganado un partido en esta temporada con Lux: tres empates y ¡8 derrotas! en los once encuentros en los que ha intervenido. Curiosamente, en las dos únicas derrotas del bloque insular en esta segunda vuelta, Lux defendía la meta al final de ambos encuentros...

Dudu Aouate, que se retiró en San Mamés debido a un pinchazo muscular, padece una lesión fibrilar de grado I en el abductor mediano de su muslo derecho que, en principio, le mantendrá entre 8 y 10 días de baja. El periodo de recuperación definitivo, sin embargo, está pendiente de nuevas pruebas complementarias que se le realizarán en las próximas horas, por lo que su baja podría ampliarse unas semanas más.

Sea cual sea el resultado de estas exploraciones, se da por hecho que el portero del Mallorca en el encuentro del próximo domingo ante el Almería en Son Moix será Germán Lux...con todo lo que ello conlleva.

La baja de Aouate preocupa en el seno del mallorquinismo. Desde la planta noble hasta la caseta. El ex meta del Deportivo es uno de los principales causantes de la recuperación protagonizada por el Mallorca desde que cruzó el ecuador de la competición. Coincidiendo con su irrupción bajo los palos. Con el meta israelí, el grupo balear taponó la hemorragia y echó el candado a una portería que se había acostumbrado a las goleadas. Su llegada serenó a la línea de cuatro y extendió su seguridad al resto de sus compañeros. Pese a no comenzar con buen pie (encajó cinco goles en sus dos primeros partidos de Liga ante Real Madrid y Villarreal), Dudu comenzó a mostrar su categoría en el arranque de la segunda vuelta. Desde entonces, el Mallorca redujo de forma notable su media de goles encajados e incluso llegó a encadenar tres partidos consecutivos -saldados con tres victorias- sin recibir ningún tanto.

A pesar de entrar en la caseta en el mercado de invierno y por las circunstancias que han afectado a la portería isleña en la presente temporada, Dudu ya es el portero que en más ocasiones ha defendido la meta del Mallorca y que mejores números presenta. Con él bajo palos, el equipo bermellón ha ganado cinco de los doce encuentros que ha disputado, con tres empates y cuatro derrotas. Ha intervenido en 1057 minutos, encajando 15 goles y un promedio de un gol cada 70 minutos.

Esos números producen sonrojo cuando los datos se comparan con Lux, que sólo ha ganado ¡1 partido! de Liga en los 21 partidos que ha disputado desde su llegada. Su única alegría fue el pasado 24 de noviembre de 2007 (1-2 en Sevilla). 7 empates y 13 derrotas completan la deficiente tarjeta de un portero cuyo rendimiento está bajo sospecha y al que se mira con lupa cada vez que se viste de corto.