02/05/09 0:00
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Efe|HOUSTON
Nada menos que 12 años tuvieron que pasar para que los Rockets de Houston, ganadores de dos títulos de liga, volviesen a las semifinales de la Conferencia Oeste al derrotar 92-76 a los Trail Blazers de Portland del mallorquín Rudy Fernández en el sexto partido de la primera ronda, que ganaron por 4-2, al mejor de siete. El ataque de los Rockets, con Ron Artest decidido a ser la gran figura, no dio respiró a unos Blazers, que estuvieron muy por debajo de la intensidad que habían aportado en los partidos anteriores. Por eso, el equipo de Houston sólo tuvo algo de resistencia en el primer cuarto, cuando los Trail Blazers aguantaron en el juego bajo los aros y pudieron contener las ansias encestadoras con las que llegó Artest, que con 27 puntos iba a ser sin discusión la figura del partido. Sí volvió a repetir un doble-doble, el pívot chino Yao Ming, que le ganó el duelo a los hombres altos de los Blazers, para conseguir 17 puntos, 10 rebotes, dos tapones y repartir dos asistencias, para su tercer partido consecutivo con un doble-doble. Una de las claves del triunfo de los Rockets fue la aportación del alero Shane Battier, que ante los Blazers realizó excelente defensa y con nueve rebotes, igualó su mejor marca de la fase final.

Los Blazers admitieron que en el partido decisivo para ellos, el que les podía permitir seguir en la competición no fue el mejor de la serie, porque enfrenten tuvieron a un rival que fue superior. «La verdad es que no estaba preparado para quedar eliminado, pero los jugadores lo dieron todo en el campo y al final no fue posible porque enfrente hubo un equipo que fue mejor», señaló Nate McMillan, entrenador de los Blazers.

El balear Rudy Fernández, que salió como titular jugó 41 minutos, el mayor tiempo que había estado en el campo durante su primera temporada con el equipo, pero no tuvo su mejor noche encestadora al sufrir molestias en la espalda y quedarse con sólo dos puntos, capturó ocho rebotes y dio una asistencia en una noche difícil para el balear.

«La verdad es que no he hecho un buen partido, no me sentí bien de la espalda, no sabía lo que me pasaba, pero nunca estuvo a gusto en el campo», declaró Rudy. «Estoy descontento de haber acabado así, pero bueno espero que dentro dos días tenga otra impresión», El mallorquín reconoció que estuvo «cansado, nervioso y con dolores en la espalda, pero al final creo que he superado con creces todas las expectativas que me había marcado cuando llegue a la NBA», subrayó. En cuanto a su participación en el Eurobasket, Fernández dijo que estaba listo. «De mi boca no salieron las palabras de que no iba a ir al Europeo, lo único que tengo que hacer es descansar y cuidarme la espalda, pero por lo demás estaré listo para la competición con la selección», aseguró.