El Real Mallorca aplaza su deuda con Hacienda

El Real Mallorca dispondrá de cinco años para satisfacer la deuda contraída con la Agencia Tributaria tras el pacto sellado entre la SAD balear y la hacienda pública, un pacto que concederá un importante respiro a las maltrechas arcas rojillas. «Este acuerdo resulta esencial para garantizar la estabilidad económica y financiera del Mallorca de cara a las próximas temporadas», explica el comunicado hecho público ayer por el club bermellón, que confirma la información adelantada por Ultima Hora en su edición del pasado 19 de febrero.

La deuda del Real Mallorca con la Agencia Tributaria asciende a una cifra que ronda los 14 millones de euros y la entidad ha presentado como garantía un bien inmueble, que en este caso es la Ciutat Esportiva Antonio Asensio. No obstante, el club ha adquirido el compromiso de satisfacer el 20% del déficit al final del presente ejercicio en un convenio que concede mayor margen de maniobra a la parcela económica y devuelve la buena sintonía en las relaciones entre ambas instituciones.

El presidente mallorquinista, Mateu Alemany, y el delegado especial de la Agencia Tributaria para Balears, Raúl Burillo, iniciaron los contactos el pasado mes de febrero cuando Alemany accedió a la presidencia. Después de que los últimos meses Vicenç Grande en la planta noble del ONO Estadi tensara las relaciones con el organismo, el abogado andritxol marcó en rojo en su agenda el acuerdo con Hacienda y precisamente su figura y la del antiguo director de gestión del club, Pere Terrassa, fueron determinantes para que Burillo atendiera a la solicitud de la SAD balear.

En las primeras reuniones el delegado especial de la Agencia Tributaria para Balears resaltó «la confianza» que concedía el nuevo equipo gestor rojillo y y evidenció su predisposición a colaborar «siempre que el Mallorca cumpla con sus obligaciones», ya que consideraba que «socialmente es importante y relevante que el equipo logre la permanencia en Primera. El club agradeció «la sensibilidad» de Burillo para llegar a un pacto crucial para la viabilidad del proyecto rojillo.