23/08/09 0:00
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Pau Aguilar/Germán March El próximo 30 de agosto arranca la temporada 2009/2010 del grupo balear de la Tercera División del fútbol nacional. Un nuevo curso que se presenta marcado por el regreso desde la Segunda División B de la Peña Deportiva Santa Eulàlia y de un histórico como el Atlètic Balears, por el estreno de los equipos que se ganaron un sitio durante la pasada edición de la Regional Preferente (Esporles, Independiente, Llosetense, Ferreries y San Rafael) y por la inesperada presencia de un último ascendido, el Collerense, que se benefició de la plaza liberada por el Eivissa, descendido a Preferente desde principios de mes por impago a sus jugadores.

El Eivissa no ha sido el único equipo que se ha visto afectado por la crisis económica, ya que todos los participantes de esta nueva edición de la Tercera balear han contado con un mismo condicionante a la hora de diseñar las plantillas de esta temporada: la reducción presupuestaria provocada por la difícil situación económica que atraviesan sus arcas. Este hecho, sin embargo, no ha traído consigo un descenso en el nivel competitivo de los equipos en liza, puesto que la temporada 2009/2010 se presume como una de las más igualadas de los últimos años. Parte como máximo aspirante al título el siempre favorito Atlètic Balears, que pretende recuperar la categoría perdida la pasada temporada de la mano de su nuevo técnico: el ex de Manacor y Montuïri, Pere Mariano.

El conjunto de la Vía de Cintura, no obstante, contará con duros rivales en su lucha por el ascenso. El Binissalem de Tomeu Pons, que ha logrado mantener el bloque que le dejó cerca del ascenso el año pasado añadiéndole algunos retoques de calidad; el Constancia de Nico López, que se ha reforzado con cuatro de los jugadores que formaban la columna vertebral del Poblense la pasada campaña y con el ex 'balearico' Lucas Pou, y la Peña Deportiva Santa Eulàlia, que bajo la batuta de Luis Rueda presentará una vez más una plantilla muy competitiva con grandes aspiraciones, prometen dar guerra a los blanquiazules hasta el último partido de Liga. La resolución final, el próximo 9 de mayo.