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Sin vestir todavía la camiseta del Mallorca, el centrocampista portugués Bruno Manuel Rodrigues Silva Bruno China (Matosinhos, 1982) ya ha ingresado en los libros de la entidad. El mediocentro luso está marcado por convertirse, de forma involuntaria, en el origen del divorcio total que existe entre el entrenador y el consejero delegado. Fichado personalmente por Javier Martí Asensio -a espaldas del técnico y del director deportivo- Bruno China se mostró «sorprendido» por la revolución mediática que ha generado su contratación y optó por mantenerse al margen de una polémica que ha agrietado los cimientos de la entidad.

Acompañado por el consejero delegado, el ex futbolista del Leixoes habló de su polémica llegada: «Desconozco las declaraciones de Manzano, pero no es una situación que me preocupe demasiado. Si estoy aquí es porque el Mallorca me quería y vengo con muchas ganas», apuntó China.

Al respecto de los problemas que su contratación ha causado entre el cuerpo técnico y los dueños del club, añadió: «Son problemas de los que no tengo que responder yo. Debo estar concentrado en mi trabajo, en ganarme un sitio y ayudar al Mallorca en todo lo posible».

Elegido mejor mediocentro defensivo de la última edición de la Liga portuguesa, se ha puesto al día en cuanto a la actualidad mallorquinista gracias a su compatriota Nunes, uno de los capitanes del equipo y hombre fuerte del vestuario: «hablado con él y sé que es uno de los principales referentes del club. Me ha sorprendido lo grande que es el club y por su forma de trabajar. Estoy muy contento de estar aquí. En Portugal sólo tienen estas condiciones y esta capacidad los tres grandes clubes del país. Por eso estoy muy sorprendido y cada vez más satisfecho de haber venido aquí».

Bruno China, que guarda cierto parecido físico con el Guille Pereyra -nuevo fichaje del Murcia- no quiso esconder su ilusión por militar en la mejor Liga del mundo: «Estoy entusiasmado con la posibilidad de jugar en España y de representar al Mallorca. Era una oportunidad que no podía dejar escapar».

El centrocampista portugués afirmó encontrarse bien físicamente y con ganas de «ganarme» un sitio en el once de Gregorio Manzano. China ha disputado los noventa minutos en las dos primeras jornadas de la Liga portuguesa, el último el pasado domingo ante el Marítimo.

El fichaje del pivote portugués le ha costado al Mallorca 400.000 euros y el futbolista firma un contrato hasta el 30 de junio de 2012. Quien más ilusionado se mostró durante la presentación del segundo refuerzo de la temporada, tras el central Rubén González, fue el consejero delegado. Javier Martí Asensio se mostró convencido de que «muy pronto» Bruno China será internacional y no dudó en asegurar que «será un jugador más» para Gregorio Manzano: «A partir del miércoles -la plantilla libra hoy- será uno más para el entrenador. Estamos orgullosos de tener a Bruno China. Hemos traído a un gran futbolista, pero no es una apuesta personal de la propiedad. El Mallorca trabaja consensuadamente y el míster conoce las negociaciones que hay abiertas. El que toma la última decisión soy yo, pero Bruno es una apuesta del club y estoy convencido de que va a salir muy bien».