A base de goles, Aritz Aduriz Zubeldia (Irún, Guipúzcoa, 1981) se ha hecho con un hueco entre la nobleza de la Liga. Gracias a sus 5 tantos en las siete primeras jornadas del campeonato -una marca que no lograron ni Güiza, ni Etoo ni Diego Tristán-, su nombre se codea con los Cristiano Ronaldo, Leo Messi o Ibrahimovic en el segundo escalón del Trofeo Pichichi a sólo una diana del valencinista David Villa. Es su mejor arranque en la máxima categoría, aunque el delantero del Mallorca apuesta por un discurso prudente. Reparte elogios entre sus compañeros, sobre todo para Víctor Casadesús, «un delantero espectacular», y no quiere fijarse un número de goles («no creo que llegue a los 27 de Güiza») ni obsesionarse con la selección a pesar de que Del Bosque le tiene anotado en su agenda. «No me quita el sueño. Mi única preocupación es colaborar para que gane el Mallorca». Ayer, con la amabilidad que destila en cada conversación, el jugador franquicia del Mallorca 09-10 atendió a Ultima Hora para analizar el mejor momento de su trayectoria.
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-Cinco goles en 7 jornadas, segundo en el Trofeo Pichichi y el Mallorca en Europa. Vaya inicio de campeonato
-El comienzo ha sido bueno, tanto a nivel colectivo como individual, pero en mi caso el mérito es absolutamente de todo el equipo, de todos los compañeros, que hacen un magnífico trabajo para que los jugadores de arriba completen esa labor. Hasta ahora, estoy teniendo la suerte de jugar y de marcar esos goles. Pero el mérito es de todo el equipo.
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-¿A qué achaca su acierto de cara a portería porque el año pasado, a estas alturas del curso, había marcado un gol y ahora ya suma tantos como en toda la primera vuelta de la anterior campaña?
-Un cúmulo de circunstancias influyen en este rendimiento. Poco a poco, los compañeros me están conociendo un poco más, ya llevo un año con ellos y conocen mis virtudes y mis defectos. Y, en este sentido, me ayudan a hacer goles. Estoy ahí arriba para culminar jugadas, pero atrás es donde nace todo.
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-También llama la atención la buena sociedad que forma con Víctor Casadesús.
-Víctor me parece un jugador espectacular. Es un futbolista del que se benefician todos los que juegan a su lado. Hace un magnífico trabajo en todos los aspectos del juego y es un jugador que busca mucho a la gente que está alrededor suyo, que nos beneficiamos de su labor. En el 2-0, le di las gracias porque lo hizo fenomenal y para hacerle partícipe de ese gol, que lo necesita. Pero estamos todos muy tranquilos. Estoy seguro que cuando el equipo lo necesite, Víctor meterá goles, Keita meterá goles, Pezzolano meterá goles y Webó meterá goles. No hay problema.
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-Desde el corazón del vestuario ¿cómo se observa el espectacular inicio de Liga? ¿Os ha sorprendido?
-Está claro que hemos empezado bien, principalmente en casa porque fuera todavía tenemos que mejorar en muchos aspectos. Pero el equipo está bien y estamos satisfechos de nuestro trabajo. ¿Sorprendidos? No lo sé. Siempre quieres hacerlo lo mejor posible, aunque nunca sabes hasta qué punto van a salir las cosas. El equipo lo está dando todo, estamos intentando hacerlo lo mejor posible y en casa los resultados acompañan. A ver si podemos mejorar fuera.
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-Su nombre figura en la parte alta de la lucha por el Trofeo Pichichi, un gol por detrás de Villa y empatado con Cristiano Ronaldo, Messi, Pandiani y Ibrahimovic. ¿Cómo se siente ahí arriba entre los mejores artilleros del campeonato?
-Uff. La verdad es que llama la atención. Pero es cuestión del momento y seguro que ellos me dejarán atrás. Ojalá siga sumando goles, aunque será muy difícil seguir el ritmo de estos jugadores.
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-Sólo dos jugadores en la historia del club, Sampedro en la década de los 60 y Amato en la temporada 1997-98, habían alcanzado la séptima jornada con 5 goles. Ni siquiera Güiza, Etoo o Tristán firmaron este buen arranque
-Son datos curiosos que no dejan de ser circunstanciales. Llevamos 7 jornadas y la cosa ha empezado bien, pero estoy seguro que no voy a llegar a los 27 goles de Güiza ni a los que pudo marcar Etoo en su momento. Ojalá que me pueda acercar lo máximo posible a ellos, pero son palabras mayores. Es algo circunstancial y mi único objetivo es seguir trabajando para que el equipo vaya sumando, que es lo fundamental.
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-Después de un verano 'movido', durante el cual incluso se cuestionó la calidad de la plantilla después de las bajas de Jurado, Arango, Moyà o
Cléber, entre otros, da la impresión que el equipo está tirando de amor propio.
-El Mallorca es un equipo muy comprometido, un grupo con un valor humano muy grande que intento hacerlo lo mejor posible. Hay veces que las cosas salen mejor o peor, pero siempre lo intenta y da la cara. Al final, la unión del grupo hace que las cosas lleguen antes o después. En casa, los resultados están llegando, pero debemos mejorar a domicilio.
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-¿La derrota de Gijón sirvió para bajar de la nube y regresar a la humildad?
-Hemos aprendido bastante porque fue un palo muy gordo caer 4-1 después de ir ganando 0-1. Pero hemos sacado la lectura positiva de aquella derrota. Ahora sabemos que debemos mantener una intensidad máxima durante todo el partido porque en el momento que dejamos de ser competitivos, nos superan.
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-Antes ha hablado del grupo humano, ¿es el mejor vestuario que ha conocido?
-Sí. A pesar de que somos cada uno de nuestro padre y de nuestra madre, de distintas ciudades o países diferentes, hay una gente espectacular, el grupo es fenomenal y esta unión se traslada en el campo.
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-Del Bosque ha comentado que es un jugador interesante y que le está siguiendo. ¿Tiene en mente la selección nacional?
-La selección no es algo que me quite el sueño. Lo intento hacer lo mejor posible en el Mallorca para que gane partidos, que es para lo que estamos. Si llegan otras cosas, bienvenidas sean, pero hay jugadores muy buenos y está muy caro entrar en la selección. De momento, bastante tengo con hacerlo lo mejor posible en el Mallorca e intentar jugar siempre, porque también está muy caro, y de momento bastante tengo con esto.
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-En el horizonte de la temporada, se divisa el Mundial...
-Uff lo veo muy, muy lejos. De momento vamos a intentar a ver si somos capaces de arañar algo o de ganar en el Vicente Calderón para mantener esta racha.
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-¿Se ha fijado en alguna cifra de goles?
-No. Soy más del día a día y sé que ahora estoy en un momento dulce, pero que llegarán los malos. Hay que estar tranquilos y seguir trabajando todos los días para intentar ayudar al equipo y que vaya ganando al Mallorca, que al final es lo importante. Quien meta los goles, es lo de menos.
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