El ataque que encabezaron el escolta Brandon Roy y el alero LaMarcus Aldridge permitió a los Trail Blazers de Portland ganar por 93-79 a los Grizzlies de Memphis, que cosecharon la sexta derrota consecutiva pese al esfuerzo del pívot catalán Marc Gasol.
Esta vez Roy sí entendió que tenía que hacer una labor de equipo y no ser sólo la primera opción de ataque, por lo que sus 20 puntos (6 de 11 tiros de campo, 2-4 triples y 6-8 de personal) y siete asistencias demostraron la validez de su aportación y liderazgo. Mientras tanto, el escolta mallorquín Rudy Fernández jugó 19 minutos para ser el más efectivo del ataque al aportar siete puntos después de anotar 2 de 3 tiros de campo, que fueron 2 de 2 triples, y 1-1 desde la línea de personal, capturó dos rebotes y recuperó un balón.
Aldridge, cada día más consistente en su juego, volvió a ser el hombre decisivo en el juego bajo los aros y con un doble-doble de 16 puntos, 12 rebotes, tres asistencias y dos tapones, también ayudó a que el pívot Greg Oden no sienta el solo la responsabilidad completa del trabajo ante los hombres altos. Oden cumplió con 14 puntos, pero todos en la segunda parte, y seis rebotes, mientras que el base Steve Blake también logró la misma anotación para completar la lista de los cuatro jugadores de los Trail Blazers que tuvieron dobles dígitos.
Los Trail Blazers (5-3), que ganaron el tercer partido consecutivo, tuvieron un 45'7 por ciento de acierto en los tiros de campo y el 50 (9-18) de triples, comparado al 37'2 y 10 (1-10), respectivamente, de los Grizzlies, que han perdido ocho partidos consecutivos ante el equipo de Portland. El encuentro quedó decidido al comienzo del tercer periodo con una racha de 14-1 y la ventaja fue superior a los dobles dígitos con un mate de Greg Oden y 10 minutos por disputarse.
Sólo Marc Gasol mantuvo su producción y consistencia en el juego al ser el líder del ataque de los Grizzlies con 20 puntos, incluidos 12 en la primera parte, y ocho rebotes. Gasol jugó 38 minutos para anotar 5 de 9 tiros de campo y 10-13 desde la línea de personal, puso dos tapones, dio una asistencia y recuperó un balón.
Mientras tanto, el veterano base Allen Iverson sigue en su domicilio de Atlanta, con permiso del propietario equipo Michael Heisley, para que solucione un problema personal. Iverson pidió irse del equipo después de disputar tres partidos y de manifestar su disgusto por salir como reserva.
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