La seleccionadora había reclamado a la Real Federación Española de Natación (RFEN) 350.000 euros por atentar contra sus derechos fundamentales en el ámbito laboral al ser relevada de sus funciones tras los Juegos Olímpicos de Londres.
Esa fue la cantidad que solicitó durante el juicio de tutela celebrado hace quince días y en el que acusó a la RFEN y a su presidente, Fernando Carpena, de atentar contra su dignidad personal e incurrir en acoso moral apartándola de sus funciones como seleccionadora nacional.
El juez ha estimado en parte la demanda formulada y ha ordenado reponer a Tarrés sus funciones de seleccionadora nacional, aunque la exonera de prestar servicios efectivos para la RFEN «sin perjuicio de continuar percibiendo el mismo salario que se venía abonando».
Todo ello hasta la extinción del contrato, que vence el 31 de diciembre de 2012. El juez declara que la actuación de Carpena «consistente en no facilitar» a Tarrés «ocupación efectiva» como seleccionadora nacional constituye «una vulneración del derecho al honor de la demandante por afectar a su prestigio profesional».
Sin embargo, el juez no ha tenido en cuenta la petición de Tarrés respecto a su reclamación económica ante la RFEN por atentar contra sus derechos fundamentales, su dignidad personal y por incurrir en daños morales.
La compensación es la estimada de dos anualidades del salario bruto que cobraba de la RFEN (85.000 euros), más otras dos en premios por medallas en campeonatos internacionales (65.000 euros 2012), a lo que había que sumar otros 50.000 euros de indemnización por daños morales.
Ante la sentencia hecha pública hoy se puede interponer un recurso de suplicación ante la Sala de los Social del Tribunal Superior de Justicia de Cataluña (TSJC).
3 comentarios
Para comentar es necesario estar registrado en Ultima Hora
quin desastreeeee. Supòs que nam directes cap a la medalla olimpica.
Si se practica deporte de élite el nivel de exigencia debe ser elevado.De lo contrario no hacen falta becas, centros de alto rendimiento, ni "stages" de ningún tipo.Episodios como este se han dado ya en gimnasia artística, en gimnasia rítmica e incluso, recuerdo un desplante de Conchita Martínez (gran tenista, pero mucho más débil de carácter que Arantxa)cuando entrenaba en Suiza. Hay quien puede aguantar y quien no.El tiempo dará o quitará razón.
Manda huevos... más les vale a las nadadoras esperar a ponerse el bañador hasta 2013.